Más de 80 heridos en represión a marcha de jubilados en Argentina

BUENOS AIRES, mayo 22.— La represión que comanda Patricia Bullrich cada miércoles frente al Congreso dejó el martes a 82 personas heridas y cuatro detenidas, algunas de ellas eran periodistas que cubrían la movilización de los jubilados.

Un nuevo operativo desmedido del gobierno de La Libertad Avanza —que horas antes no dio quórum en la Cámara de Diputados para tratar el aumento de las jubilaciones y la continuidad de la moratoria previsional—, se dio con un Parlamento totalmente vallado y las calles aledañas cortadas por la policía, que fue acompañada en la represión de la tarde con todas las fuerzas: la Federal, la Prefectura, la Gendarmería y la Policía de Seguridad Aeroportuaria.

Contra los jubilados y quienes le apoyan fueron lanzados gases lacrimógenos y los represores golpearon con bastones tonfas a los manifestantes, Los registros de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) indican que el saldo de la represión fueron 82 personas heridas, la mayoría de ellas con quemaduras en el rostro producto de los gases químicos, informó Página 12.

Las fuerzas represivas de Milei gasean a los jubilados una vez más. Foto: Telesur.

Una de las personas heridas fue hospitalizada con un corte en la cabeza por un golpe de un efectivo de la Prefectura, y agrega la publicación que también fue atacado Guillermo Lorusso, sobreviviente del centro clandestino de detención «El Vesubio» de las dictaduras militares y fundador de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos.

Nuevamente, la prensa fue uno de los blancos del operativo ordenado por Bullrich; los trabajadores La Nación, Pablo Corso y Diego Pérez Mendoza fueron heridos, y a la cronista Lula Álvarez, de El Destape, la gasearon y golpearon en la cabeza con una tonfa, denuncia Página 12. Además, detuvieron a los fotógrafos Javier Iglesias y Tomás Cuesta, que trabaja para la agencia francesa AFP y que fue liberado horas después por pedido de la fiscal Malena Mercurial.A la reportera gráfica Mariana Nadelcu le rompieron la cámara con la que registraba la represión. Mientras tanto, Iglesias junto a Leandro Nahuel Cruzado y Pablo Daniel Luna fueron trasladados a la alcaidía de la Superintendencia de Investigaciones Federales.

La represión no entiende de argumentos. Foto: Telesur.

Antes de iniciada la protesta tan brutalmente reprimida, se hizo una misa ecuménica en la que sacerdotes de iglesias católicas y evangélicas denunciaron la violencia de las fuerzas de seguridad del gobierno de Javier Milei. «No puede ser que se siga atacando cada semana a las y los jubilados que están llevando adelante un reclamo justo», dijo el padre Paco Olveira, que fue golpeado en las dos últimas marchas.

Por su parte, el director de la CPM, Roberto Cipriano García, en declaraciones a Página 12, hizo un recuento de lo que viene sucediendo en las movilizaciones anteriores y el efecto que eso genera. «El miércoles pasado fueron 100 personas heridas y una semana antes 58. La justicia que no investiga, sectores importantes de la política que no se quiere meter con estos temas y los medios empresariales de comunicación masiva que son condescendientes con el gobierno, generan las condiciones para la reproducción de violencias que degradan y deterioran nuestro sistema democrático».