Acuse de recibo
El pasado 27 de noviembre, desde El Sevillano, en la capital, Osmani Guerra contaba aquí que desde septiembre pasado y hasta el 25 de noviembre, se presentaron en su casa representantes de la Empresa Eléctrica a «cortarle la luz» por falta de pago, a pesar de que en esos tres meses lo había hecho por mediación de Tele Banca, a través de su tarjeta magnética.
La suerte fue que la mamá de Osmani, una persona de la tercera edad que permanece todo el tiempo en el hogar, en las tres ocasiones pudo evitar el molesto corte. Pero ella ya sufría el estrés y la tensión ante la posibilidad de que la amenaza se convirtiera en realidad.
Agregaba Osmani que en octubre habló con la supervisora de Tele Banca, quien le explicó que, una vez que el cliente paga mediante su tarjeta, se envía el paquete de datos a la entidad eléctrica en Capdevila, y desde allí se distribuye la información de quienes han efectuado el pago a cada oficina comercial de la Empresa Eléctrica de la capital.
También le informó que sobre este tema mantienen reuniones de coordinación con la Empresa Eléctrica. Y Osmani llamó a Atención al Cliente de la Organización Básica Eléctrica del municipio de 10 de Octubre. Y quien le atendió, le pasó la responsabilidad a Tele Banca y le sugirió que… ¡dejara de pagar la electricidad por esa entidad!
Al respecto, el 16 de diciembre respondía aquí Norma E. Triana Rodríguez, directora de Tele Banca, que se contactó con Osmani y se hizo la investigación pertinente, lo que arrojó que es cliente de esa empresa desde noviembre de 2009 para pagar electricidad y teléfono, entre los días 5 y 11 de cada mes, sin dificultad alguna.
Confirmaba que en los meses señalados en lo publicado, Osmani hizo sus pagos el 8 de septiembre, el 7 de octubre y el 9 de noviembre. Y en todos los casos, la información se entregó a tiempo a la Empresa Eléctrica el mismo día del pago.
El pasado 17 de diciembre, respondió Ricardo Mangana, director general de la Empresa Eléctrica de La Habana, que, pese a llevar algunos años con el sistema digital con Tele Banca, y que en la capital hacen uso de ese servicio más de 50 000 clientes, aún tienen deficiencias, relacionadas con el actuar del hombre y las cuales han sido analizadas y revisadas por la Dirección Comercial de esa entidad.
Asegura que Osmani realizó el pago por Tele Banca el 9 de noviembre y la información se recibió por los ficheros correspondientes en la oficina comercial de la Víbora el 10 de noviembre. Pero la auxiliar económica de allí, al no actualizar el sistema correctamente, provocó que se emitiera la orden de corte al lector cobrador para ese cliente, incorrectamente.
También, precisa, se analizó que la técnica de Atención a la Población dio una respuesta incorrecta, al no hacer las investigaciones pertinentes.
Por todas esas irregularidades, maltratos y no aplicar los procedimientos establecidos, manifiesta, se les aplicó la medida de separación definitiva de la entidad a la auxiliar económica y a la técnica de Atención a la Población.
Refiere que se determinó mantener una capacitación constante sobre el procedimiento del sistema de Tele Banca a las auxiliares económicas que operan el sistema, y se divulgó la historia de este caso entre los trabajadores de las oficinas comerciales de la capital, para que sea analizado en reuniones.
Mangana ofrece disculpas al cliente por las molestias causadas y lo exhorta a que mantenga el uso de Tele Banca como una modalidad de pago cómoda y factible.
Agradezco la respuesta, y solo me queda apuntar que, en materia de una operación comercial, en la cual intervienen dos entidades, es imprescindible la permanente conciliación. Y en las oficinas comerciales de la Empresa Eléctrica en los municipios capitalinos se requiere un control a pie juntillas para evitar tales maltratos a los clientes disciplinados y cumplidores.