El Changyuraptor yangi vivió hace 125 millones de años. Autor: BBC Publicado: 21/09/2017 | 05:06 pm
Un fósil de dinosaurio con cuatro alas y una cola de largas plumas fundamentales para disminuir su velocidad y asegurarle aterrizajes seguros fue descubierto en China por un equipo de paleontólogos.
Este nuevo fósil consolida la idea de que las aves heredaron el vuelo de sus precursores dinosaurios.
El equipo internacional, liderado por el paleontólogo Luis Chiappe, del Museo de Historia Natural de Los Ángeles, EE.UU., publica su hallazgo en la revista Nature Communications.
De 125 millones de años de edad, este dinosaurio, llamado «Changyuraptor yangi», fue encontrado en la provincia de Liaoning, en el noreste de China, una zona en la que se han hallado numerosos dinosaurios emplumados durante la última década.
Este dinosaurio extraordinariamente conservado contenía un conjunto completo de plumas de camuflaje por todo su cuerpo, incluyendo plumas extralargas en la cola. De unos 30 centímetros, las increíbles plumas de la cola del Changyuraptor son las más largas de cualquier dinosaurio emplumado.
Los análisis de la microestructura ósea realizados por la investigadora Anusuya Chinsamy, de la Universidad de Ciudad del Cabo, Sudáfrica, muestran que el dinosaurio era un adulto completamente desarrollado, pesaba nueve libras y medía 1,22 metros.
Estos dinosaurios microraptorinos tienen el apodo de «cuatro alas» porque las largas plumas pegadas a las patas parecen un segundo par de alas, siendo estas largas plumas pegadas a las piernas y las alas de estos antiguos depredadores las que han llevado a los investigadores a concluir que los dinosaurios de cuatro alas eran capaces de volar.
El nuevo descubrimiento explica el papel que las plumas de la cola jugaron durante el control de vuelo, explicando que en el caso de los voladores más grandes, resultan de particular importancia para los aterrizajes seguros.