El próximo jueves, a partir de las 2:00 p.m., representantes del MES responderán on line las preguntas de estudiantes y sus familiares sobre el preceso. Autor: Roberto Ruiz Espinosa Publicado: 21/09/2017 | 05:20 pm
Este año continúa el sistema de ingreso que se comenzó a aplicar en 2010 y lo principal es que se mantiene el rigor de hacer tres exámenes: Matemática, Español e Historia de Cuba, los cuales hay que aprobar, cada uno de manera independiente, expresó René Sánchez, director de Ingreso y Ubicación laboral del Ministerio de Educación Superior, en declaraciones exclusivas a JR.
Evaluamos que los exámenes de ingreso más que una barrera para acceder a la universidad son una oportunidad, argumentó, porque tenemos la certeza, por una investigación realizada, de que los jóvenes que los aprueban pueden ser más exitosos en sus estudios.
«Antes de hacer este tipo de pruebas, el número de bajas en primero y segundo año (de la carrera) era significativo. El sondeo nos está dando que los estudiantes que accedieron a través de los exámenes de ingreso tienen mejores resultados docentes que los anteriores».
Sánchez puntualizó que son exámenes de rigor, pero que los contenidos que se evalúan son los del programa de preuniversitario.
«Este año se ofertan 69 422 plazas», recordó. «Es un amplio plan y garantiza que las principales fuentes de ingreso tengan garantizado su espacio en la universidad.
Numéricamente, aclaró, porque quizá un joven quiere determinada carrera y no la alcance».
El directivo puntualizó que las áreas de las ciencias que están más beneficiadas en el plan de plazas son las carreras pedagógicas, médicas, técnicas y agropecuarias.
«Ha sido deprimida la oferta de plazas humanísticas y esto responde a que la entrada a la Universidad está vinculada a dos particularidades: la demanda de la economía, porque no podemos formar profesionales que después no tengan un espacio para trabajar, y las capacidades de los centros de educación superior».
Sánchez destacó que en el curso por encuentro se oferta también una amplia gama de plazas, y añadió que ya no hay que ser trabajador para acceder a estas.
«Este año aprobamos otras singularidades para el proceso de ingreso, que pensamos van a beneficiar a los aspirantes», dijo. Por ejemplo, en el caso de la modalidad de Concurso las carreras se van a otorgar de manera provincial; antes era por las plazas que ofertaba cada universidad. Esto permite que el aspirante pueda llenar una sola planilla y pedir carreras de cualquier especialidad.
«Como en años anteriores, las plazas que no cubran los estudiantes de preuniversitario u otras fuentes se van a redistribuir».
René Sánchez puntualizó que en el caso de los exámenes de concurso participan fundamentalmente los egresados de los politécnicos. «He visto una duda reiterada en la población que quisiera aclarar —acotó—; como ya no se da el título de bachiller técnico, hay quienes piensan que no pueden acceder a la Universidad y no es así; a ellos se les reconoce como vencida la enseñanza media superior.
«El título de graduado de politécnico es válido para acceder a cualquier carrera; incluso no tiene que ser de la misma especialidad. Por ejemplo, si el joven es graduado de técnico de nivel medio en Contabilidad puede pedir esa licenciatura, pero también puede solicitar Medicina o cualquier otra».
Sánchez comentó que las carreras de Ciencias Médicas son las que, cuantitativa y cualitativamente, mayor interés despiertan en los jóvenes, pues tienen una gran cantidad de plazas y siempre se cubren todas.
«Hasta el año pasado se entregaban por un escalafón municipal y en esta ocasión será a nivel provincial, lo que va a permitir que se rinda más culto al talento», concretó.
«Otra modificación importante al ingreso es que se pueden estudiar segundas carreras universitarias, siempre que exista la especialidad en el Curso por Encuentro, que esté en correspondencia con las capacidades que tenga la universidad y que no se desplace a un joven que no sea graduado universitario», precisó.
Tiene como ventaja que, como son graduados universitarios, no tienen que hacer exámenes de ingreso para la segunda carrera, destacó.
Por último, el directivo quiso hacer un comentario acerca del «mito de las vocaciones», y argumentó que a veces la familia tiene muy enraizado que sus hijos nacieron o sirven solo para un tipo de carrera, y está probado de manera científica que preparándose adecuadamente se puede estudiar cualquier profesión.
«Una carrera universitaria es una puerta más amplia a la vida, que sirve a las personas para ser más útiles, servir mejor a la sociedad, sentirse más plenos, pero no está identificada con una vocación específica», concluyó.
Como los exámenes de ingreso comenzarán el próximo 8 de mayo, y con el objetivo de ayudar a los estudiantes y sus familias a entender ese proceso, el próximo 3 de mayo, a partir de las dos de la tarde, representantes del Ministerio de Educación Superior responderán on line preguntas de nuestros lectores.
Los interesados pueden dejar sus interrogantes o criterios en nuestro cajón de comentarios, o a través del correo digital@juventudrebelde.cu