Un juicio defectuoso y fuertemente politizado, una Fiscalía que propició un ambiente hostil e influyó con su conducta impropia en la decisión del jurado, son las violaciones flagrantes del principio de debido proceso que volvieron a ser denunciadas en la Mesa Redonda Informativa, que abordó este martes el caso de los Cinco en la tercera audiencia celebrada el lunes 20 de agosto en la Oncena Corte de Apelaciones de Atlanta.
El abogado Roberto González, hermano de René —uno de los cinco cubanos injustamente encarcelados en prisiones estadounidenses desde hace nueve años—, presenció la nueva vista oral ante el panel de tres jueces y dio sus impresiones de lo allí acontecido, como también lo hicieron vía telefónica Paul MacKenna, abogado de Gerardo Hernández, y el ex fiscal general de Estados Unidos Ramsey Clark.
Los tres juristas coincidieron en señalar la importancia de las preguntas formuladas por los magistrados a los fiscales, los que no pudieron presentar ninguna prueba concluyente, ni documentos que evidenciaran que Gerardo, Ramón, Fernando, Antonio y René hubieran conspirado para cometer espionaje o para cometer asesinato en primer grado, cargos por los que fueron condenados.
El próximo 12 de septiembre iniciarán su décimo año de prisión por preservar a Cuba de las acciones terroristas que se fraguan en Miami, donde sin embargo andan en total libertad criminales como Luis Posada Carriles y acaba de ser liberado Osvaldo Mitat, a quien se le ocupó un enorme arsenal de armas destinadas a realizar atentados contra el pueblo cubano.
Ramsey Clark, quien junto a otras 73 personalidades internacionales asistió a esta vista, puntualizó que lo más importante fue el apoyo a los Cinco de personas procedentes de Europa, América Latina y de Estados Unidos, ya que muchos estadounidenses y líderes legales de todo el mundo están pendientes de este caso que —dijo— nunca debió presentarse, que fue mal concebido, y a todos luces ilegal.
«Lo evidente es que un país que dice que lucha contra el terrorismo y quiere erradicarlo, nunca arresta a personas que luchan contra él», recalcó.
Roberto González coincidió en esa valoración, cuando apuntó que tuvo una sensación personal muy reconfortante porque si durante los siete meses que duró el juicio él llegaba solo, se sentaba solo y se iba solo, ahora tuvo a 73 personas acompañándolo, procedentes de muchos lugares del mundo, que salieron con la certidumbre de que había sido importante su presencia allí.
Explicó que dos de los jueces del panel ya tienen antecedentes del caso porque fueron quienes en 2005 decidieron que Miami no era la sede apropiada para el juicio a los Cinco. Ahora deben pronunciarse ante la petición que hizo la defensa de un nuevo juicio por la mala conducta del gobierno, de una Fiscalía que malinterpretó la ley frente al jurado. Si determinan que hubo mala conducta también pueden determinar la anulación del juicio, precisó.
Roberto González también subrayó que no podíamos permitirnos que un sentimiento de derrota o de victoria nos desmovilice, porque el caso de los Cinco lo ganamos cuando ellos estén en La Habana, porque este es un juicio que lo ganas muchas veces en hechos y lo pierdes en Derecho, por la decisión de los jueces, y llamó al pueblo cubano y a quienes en el mundo comparten la lucha de los Cinco a intensificar el trabajo de solidaridad.
Esto fue ratificado por los abogados José Pertierra y Rafael Anglada, miembro este último del equipo de la defensa de los Cinco y presente en el estudio de la Televisión Cubana, quien dijo en reporte de Telesur que hay una batalla judicial y una batalla política por la libertad de los Cinco Héroes.