En 2016 se redujo hasta en un 80 por ciento la posibilidad de amputación por úlcera del pie diabético en el país
La disminución en un 80 por ciento de los riesgos de amputación en el país por úlcera del pie diabético, con respecto a 2015 —cuyo comportamiento se evidencia en los gráficos—, representa uno de los mayores logros de la ciencia cubana en 2016, y otro de los tantos que ya acumula el Heberprot-P como tratamiento adyuvante para acelerar la cicatrización de lesiones profundas derivadas de la diabetes, aseguró el Doctor Manuel Raíces Pérez Castañeda, investigador del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB).
Desarrollado a principios de la década de los 90 en este centro capitalino, como parte de un programa de investigación relacionado con los efectos biológicos de la administración parenteral y repetida del factor de crecimiento epidérmico humano recombinante (FCEhrec), desde hace poco más de una década este producto lidera la terapia más efectiva en el tratamiento del pie diabético en Cuba y varios países del mundo.
Su uso extendido a 395 unidades de salud en 198 municipios del país, dijo, significa para los cubanos otra alentadora esperanza en el combate de esta afección, que al cierre del pasado año contabilizaba cerca de un millón de pacientes cubanos y alrededor de 422 millones a nivel global, este último dato ofrecido por la Federación Internacional de Diabetes.
En un mundo donde cada 20 segundos se amputa una pierna, más del 20 por ciento de las cuales podría salvarse, que Cuba muestre estos resultados es todo un avance a la vez que un reto para los especialistas.
«El 2,72 por ciento alcanzado entre 2012 y 2015 como índice de amputaciones en el país nos deja el listón bien alto para seguir perfeccionando estrategias y programas en la lucha contra las complicaciones de esta enfermedad», concluyó.