El hipo es un reflejo involuntario e inofensivo que suele ocurrir tras ingerir mal un alimento o una bebida o respirar incorrectamente. Por lo general, desaparece a los pocos minutos. El mecanismo comienza en el diafragma, un músculo ubicado entre los pulmones y el estómago. Cuando inhalamos, este se estira, permitiendo que el aire penetre a los pulmones; cuando exhalamos, se relaja para que salga. El hipo se debe a que se crea un espasmo en el diafragma y esto obliga a la laringe a contraerse, lo que a su vez cierra la glotis (y las cuerdas vocales), creando ese sonido característico.