Parecía que habían regado una sustancia lacrimógena en el auditorio. Prácticamente todos estaban con los ojos enrojecidos… por la emoción y las remembranzas.
Hace unos días comí Pringles por primera vez. Para muchos será la primera ocasión también que escuchan este nombre. Es un aperitivo a base de papas fritas, pero no voy a hablar de aperitivos ni mucho menos de papas.
La vida es muy frágil, me dijo él. Acostados en la cama con los ojos puestos en el techo estuve de acuerdo y asentí. No pude contradecirlo. Demasiadas historias de vida se han cruzado con las nuestras en los últimos tiempos, y con ellas, emergió la convicción de que el milagro de la vida es efímero, y no siempre se valora como tal.
El planeta conmemora este martes un nacimiento muy especial: hace 20 años, en la tarde del 5 de julio de 1996, vino al mundo el primer mamífero clonado a partir de una célula adulta.
Apacibles o violentas, las olas van y vienen sobre arrecifes. Dejan huella en los materiales que depositan sobre las rocas y también en aquellos que arrastran con su retirada. Con el paso del tiempo, modifican el paisaje. La corrosión de la piedra suaviza los bordes ásperos y de ella se va produciendo la arena, finísima casi siempre, gruesa y áspera en ocasiones.
Las encrucijadas de Cuba parecen renovarse una y otra vez desde los tiempos en que dejamos de ser almohada tranquila y nos convertimos en montaña rugiente.
Tantas veces, lo que tenemos delante nos resulta tan común, que ya no lo vemos. Nos parece que acaso es el orden natural de las cosas, que estarán de una vez y por siempre; pero nos equivocamos.
Edgar Morín, el gran pensador francés, bien podría ser una de las alternativas para vislumbrar el horizonte ante los precios altos de los alimentos agropecuarios en Cuba. Morín, considerado el padre de la Teoría de la complejidad, advierte que para superar los problemas complejos no se puede contar con una sola respuesta. Se necesita, al contrario de lo que algunos pudieran imaginar, varias fórmulas y alternativas, todas debidamente integradas.
La muestra inequívoca de que se están desgranando verdades brotó en el auditorio con un silencio profundo, acompañado de los rostros serios y meditabundos. Los impactan esas palabras que van desmenuzando, con precisión, la utilización de un lenguaje de respuestas escurridizas y carentes de precisión.
Para entender a la gente joven que está de cara al surco hay que aprender a escucharlos, aun cuando ciertos términos, la desmotivación, por ejemplo, no parezcan del todo ajustados al momento que vivimos.