Valdés Mesa desarrollará una visita oficial que se extenderá hasta el día 23 del mes actual. Autor: Estudios Revolución Publicado: 18/01/2024 | 02:53 pm
El vicepresidente cubano, Salvador Valdés Mesa, arribó el jueves a Uganda para participar en la Cumbre del Movimiento de Países No Alineados y en la Cumbre Sur, donde se hará entrega a ese país africano de la presidencia del Grupo de los 77 y China.
En el marco de su estancia en ese país, Valdés Mesa desarrollará una visita oficial que se extenderá hasta el día 23 del presente mes. El Vicepresidente cumplimentará, además, programas oficiales en otros dos países africanos, Tanzania y Zimbabwe.
Como parte de las agendas previstas, el dirigente cubano sostendrá encuentros con sus homólogos y otras autoridades de los países de destino, informó Cubaminrex.
La Cumbre de los No Alineados comienza este viernes en Kampala, la capital de Uganda, nación cuyo presidente, Yoweri Museveni, se convertirá en el nuevo titular del grupo, lugar que ocupó desde 2019 su homólogo de Azerbaiyán, Ilham Aliyev.
El Mnoal, que representa casi dos tercios de los miembros de la ONU y el 55 por ciento de la población mundial, está integrado por 120 países: 53 de África, 39 de Asia, 26 de Latinoamérica y el Caribe y dos de Europa. También 17 naciones tienen categoría de observadores.
Este jueves, el canciller Bruno Rodríguez Parrilla, quien participa en Kampala en la reunión ministerial previa a la cumbre del Movimiento de Países No Alineados, intervino en la V Reunión Ministerial del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de la ONU, donde agradeció la iniciativa de Venezuela —que conduce las actividades del Grupo—, de convocar este año una reunión de Coordinadores Nacionales, cuando «el contexto internacional es cada vez más grave, complicado y desafiante».
El Ministro de Exteriores denunció que «Estados Unidos y sus aliados de la OTAN recurren a prácticas de todo tipo para imponer su dominación: instigan conflictos, violan la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional, promueven y financian estrategias de cambios de régimen, imponen y recrudecen ilegales medidas coercitivas unilaterales y recurren al uso selectivo y la manipulación de los derechos humanos con fines políticos».
Afirmó el titular de exteriores cubano que se pretende suplantar la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional por un llamado «orden internacional basado en reglas», que no ha sido consensuado, negociado ni tiene ningún reconocimiento internacional, y se trata de una pretensión inaceptable y peligrosa, de continuar su práctica de dominación y hegemonía que merecen nuestro rechazo más firme.
Dijo que «frente a los crímenes y el genocidio de Israel contra el pueblo palestino, al amparo del veto de Estados Unidos en el Consejo de Seguridad y con el apoyo de aliados de este en la OTAN, asistimos a una gravísima situación humanitaria que requiere la acción resuelta de la comunidad internacional» y al respecto condenó «los dobles raseros, la hipocresía, los silencios, la inactividad, en particular de países que se dicen defensores de los derechos humanos».
Señaló que el Grupo debiera concentrarse en la búsqueda del cese al fuego y en detener el genocidio que ocurre contra el pueblo palestino en Gaza y también en Cisjordania y apoyó una Conferencia Internacional de Paz centrada en garantizar los derechos inalienables del pueblo palestino, incluida la existencia de un Estado palestino con Jerusalén Oriental como su capital en las fronteras anteriores a 1967, así como la garantía del retorno de los refugiados.
También apoyó el ingreso pleno e inmediato del Estado de Palestina como miembro pleno de la Organización de Naciones Unidas y la demanda de la República de Sudáfrica contra Israel en la Corte Internacional de Justicia en relación con las violaciones de las obligaciones de la Potencia Ocupante como Estado Parte en la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio.