El organismo ruso investiga un caso criminal relacionado con el desarrollo de armas biológicas de destrucción masiva, financiado por el Departamento de Defensa estadounidense y otras organizaciones implicadas de ese país.
El análisis de los documentos obtenidos durante la indagación en Ucrania permitió identificar el círculo de personas relacionadas con las actividades biológicas militares en esa nación, incluidos representantes del Pentágono y dos empresas contratistas norteamericanas.
El funcionario ruso también advirtió que los resultados de los estudios fueron trasladados a los territorios controlados por Kiev antes del inicio de una operación militar en Rusia.
Sin embargo, el jefe de las fuerzas de defensa radiológica, química y biológica rusas, Ígor Kirílov, denunció el pasado 14 de abril que Washington destinó en los últimos años más de 350 millones de dólares en proyectos del Centro de Ciencia y Tecnología de Ucrania.
Aclaró que el Departamento de Estado y el Departamento de Defensa de Estados Unidos son los clientes y patrocinadores de esa institución ucraniana, que también recibe ingresos de la Agencia de Protección del Medio Ambiente y de los Departamentos de Agricultura, Salud y Energía norteamericanos.
(Con información de PL)