Henrique Eduardo Alves ha presentado su renuncia, por hallarse involucrado en casos de corrupción. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 06:33 pm
BRASILIA, junio 6.— El ministro de la Presidencia de Brasil, Eliseu Padilha, admitió que existe «preocupación» en el Gobierno interino de Michel Temer por sospechas que salpican ahora al titular de la cartera de Turismo, Henrique Eduardo Alves, un influyente dirigente del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que lidera Temer, dijo EFE.
«Cualquier situación negativa avergüenza al Gobierno», reconoció Padilha en una entrevista con la Radio Gaúcha, en la que comentó la situación de Alves, quien de acuerdo con los documentos obtenidos y publicados este lunes por el diario Folha de Sao Paulo estaría implicado en la red de corrupción que operó en la estatal Petrobras.
Alves, quien ocupó el mismo cargo en el Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, suspendida de sus funciones el pasado 12 de mayo, se habría valido de la red de Petrobras para financiar sus campañas políticas, según sostuvo Folha de Sao Paulo.
El periódico citó documentos que dice haber obtenido con fuentes del Ministerio Público, los cuales revelan que Alves se valió del escaño que ocupaba en la Cámara de Diputados para favorecer a empresas privadas implicadas en las corruptelas en Petrobras.
El procurador general de la República, Rodrigo Janot, envió un despacho al Supremo Tribunal Federal en que acusa al ministro de Turismo, Henrique Alves, de haber recibido fondos desviados de Petrobras con la participación del suspendido presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, de ese mismo partido, apuntó Xinhua.
En las últimas dos semanas han caído ya dos ministros de Temer, y este fin de semana, la prensa local publicó detalles de la confesión de uno de los implicados en el caso, el exsenador del PMDB Sergio Machado, quien en un acuerdo de cooperación con la justicia habría asegurado que pagó millonarias comisiones a varios líderes de esa formación política, agregó EFE.
Conforme con esos documentos, obtenidos por varios diarios, Machado confesó que entre los beneficiarios de la red de corrupción en la estatal petrolera estaban el actual presidente del Senado, Renán Calheiros; el exmandatario José Sarney y el senador Romero Jucá, todos relevantes dirigentes del ahora gobernante PMDB.
Jucá, uno de los hombres más cercanos a Temer, llegó a ocupar el cargo de ministro de Planificación durante las primeras dos semanas del equipo interino, pero dimitió después de que se filtraron unas grabaciones en las que afirmaba que había que poner fin a las investigaciones.
En sus declaraciones a la prensa, el ministro Padilha expresó también que Temer estudia lanzar un paquete de «medidas de impacto» en el corto plazo para estimular la actividad económica, y entre las posibles iniciativas están la revisión de las reglas para la explotación de los campos petroleros submarinos presal, la total apertura del sector aéreo al capital foráneo y la liberación de compras de tierras a inversionistas extranjeros, reportó Xinhua.
Por otra parte, Raimundo Lira, quien preside la Comisión del Senado que juzga a la presidenta constitucional Dilma Rousseff, anunció que ha descartado una propuesta hecha por la senadora Simone Tebet, influyente figura del PMDB, para acortar los plazos para la conclusión del proceso, divulgó EFE.
Tebet pretendía con su propuesta que el proceso concluyera a mediados de julio, al menos 20 días antes de lo previsto inicialmente, con lo que se afectaría el derecho a la debida defensa de la mandataria electa.
Según ese programa, que aún deberá ser aprobado formalmente por la comisión, la primera de las dos votaciones en que el pleno del Senado deberá decidir la suerte definitiva de Dilma Rousseff se celebraría entre los días 1ro. y 2 de agosto.
Si en esa sesión, 41 de los 81 senadores respaldan la continuidad del proceso, el pleno deberá ser convocado nuevamente, pero en esa ocasión por el presidente del Supremo, para una última votación en la que decide una mayoría calificada de por lo menos 54 senadores.
Si no se lograse esa mayoría, la mandataria sería absuelta y deberá retomar el poder una vez que se publique la sentencia, con lo cual Temer volvería a ocupar la vicepresidencia, señaló EFE.