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PARÍS, enero 16.— Seis días después del inicio de la intervención militar francesa en Malí, las autoridades imponen restricciones a los medios y las escasas fotos difundidas hasta hoy muestran poco de lo ocurrido en el campo de batalla.
«Malí, una guerra sin imágenes», titula el diario Lâ Express, «La armada francesa organiza la censura», señala Lâ Humanité, mientras que Le Monde se pregunta «Cuáles son las imágenes de la guerra en Malí».
Hasta ahora los videos y fotografías «no son más que de calma y serenidad», indica Le Monde y añade que los periodistas no han podido salir de Bamako y solo filman el aterrizaje de los aviones, el desembarco de tropas o el entrenamiento de los soldados.
Oficialmente, por motivos de seguridad las autoridades no permiten a la quincena de camarógrafos y fotógrafos pasar más allá de Ségou, una localidad ubicada al norte de la capital.
Thierry Thuiller, director de información de France Televisions, considera que hay otra razón y es que las fuerzas especiales, habituadas a las operaciones secretas, no están acostumbradas a la presencia allí de los medios de prensa.
Laurent Gervereau, presidente del Instituto de Imágenes y responsable del sitio Decryptimages, recuerda que por razones de propaganda, esta puesta a distancia de los medios existe desde la Guerra del Golfo.
«Después de esta época, se sabe que es posible ganar sobre el terreno y perder en el frente de la opinión pública que no está habituada a ver muertos en tiempos de paz», añade Gervereau.
Por el momento los periodistas enviados a Malí están confinados en Bamako, lejos del frente de batalla y reducidos a retransmitir los comunicados a cuenta gotas del estado mayor francés.
