DOHA, Qatar, marzo 31.— El presidente venezolano, Hugo Chávez, respaldó el martes a su homólogo sudanés, Omar al Bashir, en su confrontación con la Corte Penal Internacional (CPI) y el Consejo de Seguridad de la ONU, durante su intervención en la Cumbre de países árabes y sudamericanos, reportó DPA.
La CPI «no tiene poder para aprobar una acción de ese tipo contra un presidente en el cargo», dijo Chávez al llegar a Doha, en declaraciones difundidas por la emisora Al Jazeera. «Lo hace porque es un país de África, un país del tercer mundo», añadió.
«¿Por qué la CPI no ordena la detención de Bush o la detención del presidente de Israel?», inquirió Chávez, en clara alusión al ex presidente de Estados Unidos y al mandatario israelí Shimon Peres, al que criticó por la reciente ofensiva de Israel en la Franja de Gaza.
Chávez se unió al respaldo manifestado ayer por los líderes de la región en la vigésimo primera cumbre de la Liga Árabe, celebrada en Doha, a la que acudió Al Bashir pese a la orden de arresto en su contra por supuesta complicidad en los crímenes contra la humanidad cometidos en la región sudanesa de Darfur.
«Apreciamos la importante postura que los países latinoamericanos tomaron frente al último ataque israelí en Gaza», señaló por su parte el secretario general de la Liga Árabe, Amro Musa.
«El objetivo de un Estado palestino independiente y viable no ha sido conseguido hasta ahora debido a Israel», dijo además el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, otro de los asistentes a la reunión, y el primero en proponer una cumbre de este tipo, de la que fue anfitrión en 2005.
También la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, expresó sus críticas contra el Estado sionista. «Condenamos los recientes ataques y esperamos que se retomen las negociaciones», dijo, y agregó: «Esperamos ver un Estado palestino al lado del Estado israelí».
Según EFE, una declaración emitida el martes por los 12 países sudamericanos y los 22 estados árabes reunidos en Doha, muestra el deseo de los participantes de trabajar con el propósito de promover las relaciones entre ambos grupos y coordinar sus esfuerzos para crear una comunidad fuerte en favor de los intereses comunes.
En tal sentido, expresaron su convicción acerca de la importancia de la cooperación Sur-Sur como un «mecanismo efectivo para promover la capacidad constructiva y el intercambio de experiencias» en el desarrollo, la innovación y la lucha contra la pobreza.
El comunicado «reafirma la necesidad de alcanzar una paz justa, duradera y global en Oriente Medio», y se pronuncia por la creación de un Estado palestino junto a un Estado de Israel, el cual debe retirarse de los territorios ocupados en 1967.
Asimismo, se condena la agresión militar israelí contra Gaza entre finales de 2008 y febrero pasado, y se califican de injustas las sanciones estadounidenses contra Siria.
De igual modo, se valida que el uso de energía nuclear para fines pacíficos es un derecho inalienable para los países firmantes del Tratado de No Proliferación de armas de destrucción masiva (TNP) y se puntualiza que aplicar este derecho de una manera selectiva y discriminatoria podría afectar la credibilidad del tratado.