NACIONES UNIDAS, octubre 14.— El Consejo de Seguridad aprobó este sábado severas sanciones contra la República Popular Democrática de Corea (RPDC) en represalia por su reciente prueba nuclear, pero descartó el uso de la fuerza militar para obligar su cumplimiento.
En el sexto día de tensas negociaciones en torno a un borrador elaborado por Estados Unidos, los 15 miembros del Consejo de Seguridad aprobaron una versión modificada amparada en el Capítulo siete de la Carta de la ONU, señala el corresponsal de Prensa Latina.
De esa manera quedó establecido el cumplimiento obligatorio de esas sanciones, pero según como está previsto en el Artículo 41, se descarta el uso de la fuerza militar para hacer cumplirlas.
La resolución aprobada incluye un enérgico llamado a la reanudación de las conversaciones a seis partes entre Estados Unidos, China, Rusia, la RPDC, Corea del Sur y Japón para lograr una solución pacífica a la crisis nuclear en la Península Coreana.
La acción del Consejo de Seguridad fue rechazada por el embajador de la RPDC en la ONU, Pak Gil Yon, quien acusó a ese alto organismo de perder su imparcialidad y de actuar con doble rasero por no condenar las agresiones de Estados Unidos contra su país.
El embajador Pak dijo que la prueba realizada por la RPDC responde a sus preparativos de autodefensa frente a las amenazas de ataque nuclear preventivo por parte de Estados Unidos.
«Mi gobierno ha hecho todo lo posible para lograr un arreglo pacífico a los problemas en la Península Coreana», dijo Pak, quien abandonó de manera abrupta la sala de Consejo en señal de protesta.
Entre las medidas punitivas figura la prohibición de transferencias de instrumentos, medios, equipamientos y tecnologías que puedan ser utilizados en los programas de armamentos nucleares y la producción de proyectiles balísticos de la RPDC.
La resolución de condena a las autoridades en Pyongyang por la prueba nuclear anunciada el lunes último también decreta un embargo de armas convencionales que incluye aviones y helicópteros de combate, tanques y artillería pesados.
El Consejo de Seguridad decidió que todos los miembros de la ONU deben prevenir que a través o desde su territorio se realice el abastecimiento directo o indirecto, venta o transferencia a la RPDC de armamentos pesados y materiales con fines nucleares.
Esa disposición contenida en la resolución aprobada este sábado implica la obligación de cada Estado a inspeccionar los cargamentos de mercancías con destino a la RPDC o procedentes de ese país, a fin de evitar el contrabando de esos artículos prohibidos por la ONU.
Al respecto, el embajador de China, Wang Guangya, dijo que su país, que comparte amplia frontera con la RPDC, se mantiene renuente a esas inspecciones y que por tanto no las aprueba.
Sin embargo, Wang indicó que la resolución aprobada es firme y balanceada, y que deja abierta las puertas para un arreglo negociado mediante el diálogo a la crisis nuclear en la Península Coreana.
Por su parte, el embajador de Argentina Cesar Mayoral se mostró confiado en que la RPDC reconsidere su actitud, retorne a las conversaciones entre las seis partes y se encuentre una solución satisfactoria para todos los involucrados en ese asunto, señala PL.