Maduro presidió una reunión de la dirección nacional del PSUV con los gobernadores y gobernadoras del chavismo. Autor: José M. Correa Publicado: 21/09/2017 | 05:28 pm
CARACAS.— Los 20 gobernadores socialistas elegidos en las elecciones regionales del pasado domingo en los 23 estados del país (en solo tres los políticos derechistas «quedaron con cabeza») asumirán sus cargos antes del 30 de diciembre.
El Comando Político del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y los dirigentes estaduales perfilaron la agenda para comenzar de inmediato a implementar la estrategia del Plan Socialista 2013-2019 orientada por el presidente Hugo Chávez, pero a ese nivel de gestión sociopolítica.
Nicolás Maduro, vicepresidente ejecutivo de la República, dirigentes nacionales del PSUV y gobernadoras y gobernadores realizaron la víspera una reunión de tarea que concluyó con una conferencia de prensa en el Teatro Principal de Caracas, aledaño a la Plaza Bolívar, el centro arquitectónico, histórico y cultural de esta capital.
«Nuestros gobernadores y gobernadoras están consustanciados, casados, con el Plan de la Patria», señaló Maduro, quien ratificó la victoria aplastante de los bolivarianos en los comicios celebrados el pasado domingo, cuando se levantaron con el 87 por ciento de las 23 jurisdicciones federativas del país.
Maduro recordó que en la jornada no se perdió ninguna entidad antes gobernada por el chavismo (15). En buena parte de ellas se renovó la figura estadual, no obstante —explicó—, fue una decisión de Chávez en consulta con el pueblo, quienes respaldaron las candidaturas del Presidente bolivariano.
Fue otra muestra —señaló— de la «capacidad de Chávez de oír al pueblo y gobernar obedeciendo al pueblo».
El Vicepresidente Ejecutivo —segundo en la estructura de poder del país— reseñó que en la reunión del Comando Político del PSUV y sus gobernadores y gobernadoras se comenzó a estructurar el trabajo de los próximos años entre el poder central y los regionales en temas como el desarrollo económico.
Una premisa es la visión de convertir cada jurisdicción en un «Estado potencia» en el camino hacia una «Venezuela potencia, productiva y socialista», explicó.
Otro eje fue fortalecer la Gran misión A toda vida Venezuela y lograr que todas las ciudades y pueblos sean espacios seguros, de no violencia, donde prevalezca una cultura de la vida.
Entre los propósitos está desmantelar los grupos y bandas criminales heredadas de las prácticas y maneras a que condujo la vieja república capitalista e imponer el imperio de la ley: pero no cualquiera —aclaró—, sino las «leyes revolucionarias».
También se desarrollarán —siempre según las órdenes e indicaciones de Chávez— planes especiales para mejorar la vialidad, la infraestructura, los servicios de agua y electricidad, entre prestaciones comunales.
En las regiones se reforzarán, además, las emblemáticas grandes misiones sociales. El corazón (creo yo) de las políticas implementadas por Chávez para comenzar a enraizar esa cultura de equidad, inclusión y superación de la pobreza que ha caracterizado la revolución democrático-popular venezolana en estos 14 años de «cambio de época», que ha liderado en el camino progresivo hacia el socialismo que el líder revolucionario ha ido asumiendo paulatinamente.
Según Maduro informó, durante la primera reunión política de este miércoles entre el Ejecutivo, el PSUV y sus 20 liderazgos regionales, se decidió establecer de manera permanente un sistema de trabajo que a pesar de las navidades y el fin de año no prevé días de asueto, y donde se tomarán decisiones políticas y legales que se irán dando a conocer al pueblo.
La Revolución Bolivariana —enfatizó— está trabajando. Y lo hace de forma firme, dijo. Consciente de que el mayor apoyo al presidente Chávez «es el trabajo y la dedicación» día a día.
Somos —señaló— «un solo equipo, un solo plan». Y tenemos «un solo líder y un solo jefe», en referencia al presidente Hugo Chávez, quien se recupera de una compleja intervención quirúrgica en La Habana.