MANILA, dic 17.— Unas 440 personas murieron y miles permanecen desaparecidas o sin hogar tras el paso del tifón Washi por el sur de Filipinas, informó hoy la secretaria general de la Cruz Roja, Wendolyn Pang, quien explicó que la cifra de fallecidos y desaparecidos podría aumentar significativamente, sobre todo en la isla de Mindanao, sitio más afectado por la tempestad.
Los equipos de rescate encontraron la mayoría de los cadáveres en Cagayan de Oro e Iligan, donde familias enteras perdieron sus hogares y pertenencias por los vientos y las inundaciones. Decenas de miles de filipinos buscaron refugio en zonas altas de Mindanao, y unas 20 mil personas se encontraban en centros de acogida abiertos en Cagayan de Oro, sin servicio eléctrico desde la madrugada, precisa PL.
Las autoridades prevén que la tormenta se aleje por el Mar de China Meridional mañana domingo, si no se registran cambios en su rumbo y velocidad. Más de un centenar de personas murió en Filipinas en septiembre y octubre de 2011 ante la incidencia de los tifones Nesat y Nelgae por la región septentrional del país.
Expertos en desastres naturales señalaron que el asentamiento de casas precarias es uno de los factores que elevan el número de víctimas en Filipinas tras la ocurrencia de catástrofes, lo cual evidencia el mal estado de la infraestructura. La deforestación también favorece las riadas y avalanchas de tierra, frecuentes durante la estación lluviosa que comienza en mayo y concluye en noviembre.