Muamar El Gaddafi propuso hoy a la OTAN un cese del fuego y discutir posibles negocios petroleros. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 21/09/2017 | 05:08 pm
El líder libio, Muamar El Gaddafi, propuso hoy a la OTAN un cese del fuego y discutir posibles negocios petroleros, pero afirmó rotundamente: «No dejaré mi país y lucharé hasta la muerte», informó Prensa Latina.
«Nadie puede forzarme a abandonar mi país y nadie puede decirme que no pelee por él», añadió el veterano estadista en su más reciente discurso trasmitido este sábado por el canal estatal Al Jamahiriya, pese a un intenso bombardeo aéreo sobre Trípoli y otras ciudades.
La agencia oficial de noticias JANA y la propia televisión reportaron bombardeos en los alrededores de la sede del citado canal, y aseguraron que los proyectiles cayeron cerca del edificio de la Fiscalía General y de otros dos establecimientos gubernamentales.
Mientras aviones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) atacaban, El Gadafi exhortaba a Francia y Estados Unidos a negociar una salida política a la crisis en Libia o aceptar un armisticio, «pero este no puede ser de un solo lado».
El líder libio insistió en que todas las partes deben estar involucradas en negociaciones para el cese de las hostilidades, y no únicamente sus propias fuerzas que combaten a los rebeldes armados en el oriente del país y en zonas del occidente como Misratah.
Al exhortar a la alianza atlántica a detener los bombardeos, señaló que las tropas libias no atacan a las potencias occidentales ni cruzan el mar. "Déjennos negociar con ustedes, los países que nos atacan, déjennos negociar", recalcó.
Indicó que si es petróleo lo que los países de la coalición bélica están procurando, no hay problemas en negociar contratos. «Si quieren petróleo, firmaremos acuerdos con sus compañías. No merece la pena entablar una guerra», añadió.
El Gadafi subrayó que si las potencias de la OTAN muestran desinterés en conversar, el pueblo libio no se rendirá y estaría dispuesto a morir resistiendo los ataques terroristas. «Libertad o muerte. No rendición, no miedo, no huída (del país)», puntualizó.
Asimismo, urgió a Rusia, China y países amigos africanos y latinoamericanos a presionar al Consejo de Seguridad de la ONU para reconsiderar la resolución que autorizó la imposición de una zona de exclusión aérea y los bombardeos contra la nación norafricana.
El viernes, el conflicto libio amenazó con regionalizarse por choques en la frontera con Túnez a raíz de disparos de artillería del Ejército local contra posiciones de la insurgencia en la localidad de Dehiba, donde murieron tres soldados regulares.
La zona de Dehiba se considera estratégica por ser la vía principal de enlace de los rebeldes libios de las montañas occidentales con el exterior por el oeste del país.
Entretanto, prosiguen los cruentos combates en la también occidental Misratah, asediada durante más de dos meses, dado que el Ejército logró bloquear ayer el puerto, bajo control insurrecto, y advirtió que atacaría cualquier barco que atracara sin autorización.