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Esta caricatura pertenece a Ángel Velazco. Autor: Ángel Velazco Publicado: 21/09/2017 | 04:58 pm
CARACAS.— Pueblo y movimientos de solidaridad en la Plaza la Candelaria; los diputados en el plenario de la Asamblea Nacional; venezolanos, cubanos y latinoamericanos en la histórica Casa Amarilla de la Cancillería, el reclamo fue el mismo: señor Presidente de Estados Unidos, extradite al terrorista Luis Posada Carriles a Venezuela para pueda hacerse justicia o júzguenlo por lo que es: asesino.
Y en esa movilización por la verdad y la justicia estuvo presente, marcando ruta, el Comandante Chávez, en su página blog o bitácora y vía Twitter. Así escribió el martes 15 de junio, y lo pudimos leer sus 580 699 seguidores en esta verdadera red social:
Qué molleja compadre, el gobierno gringo nos acusa de todo, pero hoy se cumplen 5 años de la solicitud de extradición del granterrorista Posada Carriles y ni siquiera dan respuesta. Qué hipocresía la de este mundo. ¡¡Viva la Revolución, carajo!!
En el blog de Hugo Chávez, como complemento de este comentario breve, incisivo y contundente, Ángel Velazco aportó esta caricatura que también lo dice todo.
Y los comentarios no se hicieron esperar... Aquí va un par de ellos como muestra del pensar de un pueblo que le sigue:
15.Jun.2010 06:11 pm
Sulin Fernandez (Miranda) dijo:
Esto revela la indiferencia de ese gobierno ante lo que es justo para nosotros, el irrespeto que nos tiene y el deseo de usarnos a su conveniencia, creando seres sin alma por la patria, drogando a nuestro pueblo, prostituyendo con sus series a nuestras niñas, despreciando lo propio, nuestra historia, costumbres, jamás de ayudarnos, seamos sembradores como el comandante, con su ejemplo, con su vocación de educar no podemos agotarnos, somos la generación que esta cambiando la historia … imera
15.Jun.2010 06:17 pm
Maria Garcia (Táchira) dijo:
Y el Nobel de la paz, bien callado
Vaya, que si el caso no camina en los vericuetos de una justicia ciega y parcializada que ampara a sus terroristas, sí se teje en la conciencia y el clamor de los pueblos.
