El remero cubano Ángel Fournier clasificó a la final de la Copa del Mundo en Belgrado. Autor: Getty Images Publicado: 02/06/2018 | 11:50 pm
El remero guantanamero de 30 años Ángel Fournier demostró este sábado que todavía no está dispuesto a abandonar la elite de su deporte, tras avanzar a la final de su especialidad, el single scull, durante la primera fase de la Copa del Mundo que concluye mañana en Belgrado, capital de Serbia, donde se presentaron más de 500 atletas de 40 naciones y él es el único representante por la Isla.
El discípulo de Joan Manuel Paula llegó a la ciudad europea después de realizar una extensa y provechosa preparación, primero en las alturas de Monterrey y luego en Ciudad de México. De esa manera, el oriundo del Guaso se estrenó internacionalmente esta temporada en la parada inicial de la Copa del orbe, en la que avanzó el viernes a una de las semifinales, al quedar primero de su heat clasificatorio y de su serie de cuartos de final.
Hoy, en la segunda de las semifinales, el doble subtitular universal cumplió la ruta de dos kilómetros en el segundo escaño, con tiempo de 6:46.990 minutos (m), superado por el suizo Roman Roeoesli —un hombre que ha desarrollado la mayoría de su carrera en embarcaciones colectivas— con registro de 6:45.520 m, mientras que en la tercera plaza entró el local Milos Vasic (6:49.340 m).
El crono de Fournier fue el cuarto más destacado entre los seis finalistas que saldrán mañana en busca del primer lugar de una prueba que reunió a 34 exponentes. En esa instancia, en la que el antillano bogará por la línea dos, los reflectores estarán sobre el checo Ondrej Synek, cinco veces campeón mundial y en dos ocasiones subtitular olímpico.
Antes de que el cubano —con par de preseas de plata en 2017 en esta lid— se involucrara en la competición en suelo serbio, JR conversó con él sobre aspectos recientes de su trayectoria deportiva, comenzando por el segundo escaño que obtuvo en el Campeonato Mundial de Sarasota, Estados Unidos, el pasado año.
«Fue una competencia que tuvo muchos adversarios fuertes en mi modalidad, me preparé muy bien, pese a todos los contratiempos que sufrimos con el visado para llegar al país del evento. Los entrenamientos los realicé consciente de que había rivales de enorme calidad como el checo, el neozelandés o el croata. En mi prueba es muy difícil hasta incluirse entre los seis primeros, sin embargo, creo que se cumplieron las expectativas y los objetivos que nos trazamos específicamente.
«Al llegar un día antes a la lid, me costó un poco adaptarme, pero como decimos en Cuba, le cogí la vuelta rápido y nos planteamos estrategias con la dirección del aire, física y psicológicamente mejoré y competí con tremenda confianza en la final, en la que salí con la medalla de plata», aseguró.
En cuanto a la actual temporada expresó que «es un año intenso con varias competencias importantes, como el clasificatorio a los Juegos Panamericanos de Lima, las Copas del Mundo, el Campeonato Mundial en Bulgaria y los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla. Para afrontar todas esas metas hemos realizado una buena preparación, porque es un año muy largo, hasta octubre estaremos compitiendo y el nivel exige un gran entrenamiento.
«A los Centroamericanos iré en dos pruebas, en el single y en el doble, y el objetivo será obtener las dos coronas. En nuestra área no debo tener problemas para alcanzar esos propósitos, pero no es una competencia que debamos descartar. Tenemos modalidades que necesitan reforzar sus tripulaciones, pulir detalles y mejorar aspectos, por lo que hay que remar y consagrarse en el entrenamiento. Esas medallas serían muy positivas por su aporte a la delegación», dijo el remero, que posee dos cetros continentales en el single scull.
Sobre su condición de motor impulsor de esta disciplina en Cuba, el portento guantanamero declaró que «mis compañeros cuentan incondicionalmente con mi apoyo en cuanto a experiencia, siempre les aconsejo, porque he estado en cuanto evento tiene este deporte a nivel mundial y puedo decirles los pros y los contras de cada situación. La explicación para mejorar es simple: entrenar, entrenar y entrenar. Sacrificarse todos los días es la clave de los triunfos».