Clara María Díaz Venet sorprendió con su inclusión en el grupo de 64. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 05:49 pm
Era de esperar. La falta de roce internacional le pasó factura a ocho de las diez atletas cubanas que intervinieron este jueves en la primera jornada del Grand Prix de espada para damas, y solo Clara María Díaz Venet y Ceily Mendoza lograron incluirse en el selecto grupo de 64 que buscarán hoy las medallas en esa especialidad.
El certamen que junto a la Copa del Mundo de florete se efectúa desde ayer y concluirá el lunes 26 de mayo en Pabexpo, al oeste de La Habana, reúne a la mayoría de las principales espadistas del orbe, entre ellas el uno-dos del ranking, la rumana Ana María Branza y la húngara Emese Szasz, respectivamente, y casi todas las inscriptas asistieron el fin de semana pasado a la Copa del Mundo de Río de Janeiro.
Las dos anfitrionas dieron «la estocada» en la última ronda eliminatoria. Para la santiaguera Clara María este fue un resultado sorpresivo, pues ella no forma parte de la preselección nacional, y es una de las dos atletas criollas invitadas a la justa. «Este es un torneo muy fuerte, muy exigente, de veras que me siento feliz de poder avanzar», expresó en exclusiva para JR.
Sobre la actuación de sus pupilas, el entrenador principal de Cuba en esa arma, Pedro Enríquez Gómez, explicó que la justa además del necesario tope con la elite, forma parte de la preparación para la principal competencia del año, los Juegos Centroamericanos y del Caribe, de Veracruz, en noviembre próximo.
Hoy, a partir de las 11 de la mañana, se reanuda la lid de espada (f), cuya final está prevista para cerca de las cuatro de la tarde.
La favorita Ana María Branza, una de las 16 que ayer no tuvieron que desenfundar la espada en la ronda clasificatoria, debutará frente a la estadounidense Amanda Sirico. Mientras, su posible adversaria en la discusión del oro, la húngara Emese Szasz será rival de la rusa Tatiana Logunova. De avanzar ambas a la final, se reeditaría el duelo por el primer lugar del año pasado cuando ganó la rumana.
Las dos locales irán ante espadistas chinas, quienes son entrenadas por un francés, Daniel Levavaseur, que en diálogo con la prensa nacional elogió la esgrima cubana, y reconoció, por tanto, la importancia de que esta justa sea en La Habana.
La espada de Ceily Mendoza tendrá que semejar un taladro para poder marcarle a la muralla asiática Yujie Sun, tercera sembrada en la lid. Y también sale con poquísimas opciones la indómita Clara María en su duelo contra Ansi Xu, cuarta en el escalafón de la justa.
Este viernes comienza además la eliminatoria de la Copa del Mundo de florete masculino, en la que participarán 131 atletas, encabezados por la mayoría de los jerarcas universales. Para mañana sábado están previstas las semifinales y finales de esa arma, en la modalidad individual.