El cubano nunca cedió en ninguno de sus combates. Sonó por vez primera el himno nacional en Beijing. Ahora toca el turno a los luchadores del estilo libre, que entrarán en acción el próximo lunes
El luchador de estilo grecorromano Mijaín López se convirtió en el primer medallista de oro cubano en los Juegos Olímpicos de Beijing, mientras que su compañero Yunior Estrada no pudo avanzar a los cuartos de final.
Mijaín, campeón mundial de los 120kg en el campeonato Bakú en el 2007, dispuso del bielorruso Siarhei Artsiukhin por 5-1 en su primer cotejo de octavos de final.
Así, López se vio frente al armenio Yuri Partikeev en la siguiente ronda, y tras perder el primer round, lo derrotó por completo en el segundo tras derribarlo y pegarlo al colchón, acción que lo declaró como vencedor absoluto.
Luego, el cubano se enfrentó en semifinales al sueco Jalar Sjoberg, quien derrotara sorpresivamente en semifinales al estadounidese Dremiel Bayers, subcampeón de la copa del mundo de Szombathely, Hungría, este año.
Allí, Mijaín se levantó como un gigante sobre sus 195 centímetros de estatura y dominó magistralmente a Sjoberg en los dos primeros rounds para asegurar su pase a la final.
Finalmente el pinareño enfrentó al ruso Khasan Baroev por el metal dorado. Mijaín fue categórico y lo venció en el primer round por 5-0, mientras que en el segundo no se dejó marcar ningún punto técnico por Baroev para alzarse finalmente sobre lo más alto del podio. Minutos más tarde, sonó el himno nacional por primera vez en la capital olímpica.
Por otra parte, Yunior Estrada venció en su primer combate de la división de los 84kg al eslovaco Attila Batki por 4-0 y 5-0, por ese orden. En su segunda presentación cedió en el primer round ante el experimentado sueco Ara Abrahamian por 2-1, mientras que en el segundo el cubano logró vencer por 1-0. Ya en el definitorio, Estrada presentó férrea resistencia desde los primeros compases pero no pudo marcar su punto técnico y finalmente quedó fuera de la competencia.