El mejor amigo del hombre toma por asalto las Tres del Domingo. La garantía de cumplir las reglas del tránsito se tienen con un perro Pastor que vive en la isla griega de Lefkada, y quien no le admite a su dueño exceso de velocidad, cuando le acompaña en sus viajes en moto por la campiña. Un paseo que no solo disfruta, también interpreta su acto circense, porque hace el recorrido balanceándose parado sobre el asiento posterior del vehículo. Por supuesto, es también un deleite y motivo de asombro para quienes lo ven desde los bordes de la carretera o se cruzan en su camino. Todavía se desconoce si aspira a algún récord Guinness, pero bien podría.