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Los hermanos reunidos se hicieron bromas unos a otros. Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 21/09/2017 | 06:00 pm
Fueron dos horas asaltadas por la risa, por las voces de los hombres a los que estuvo dedicado el programa radial durante 12 años, empeñado en dar a conocer la verdad y en llevarles a ellos todo el aliento.
Desde hace pocos días la luz lo inundó todo, decía Arleen Rodríguez Derivet, conductora del programa, y es cierto. Los Cinco comentaron del valor inmenso de escuchar La luz en lo oscuro, de Radio Rebelde, cada domingo en la noche.
Gerardo tuvo la oportunidad de agradecer a María Orquídea, ese ángel, como la llamó, que le transcribía el programa y se lo hacía llegar en cartas de muchas páginas para que él no se perdiera nada, y ella pudo enviar un beso a cada uno de los Cinco.
Sabiendo que él siempre anda haciendo travesuras, fue hermoso escuchar a esa cienfueguera preguntar: ¿Pero tú eres mi Gerardito?
Los Cinco y sus familiares tomaron el estudio que por tantos años clamó por su regreso y compartieron emociones. Mirta dijo adiós a las lágrimas a voz en cuello y Maruchi declaró que ya no llora: «ahora bailo».
Después de lo ocurrido en el concierto de Silvio comentaron entre bromas algunos detalles. Gerardo explicó el significado de las canciones de Silvio para él, quien antes de partir escogió algunas para dejarlas a su esposa.
«Me dije: yo se la voy a dejar ahora y ella quizás no sepa (…) Uno se debate entre el deber de no decirle nada a la compañera (qué vas a hacer, para dónde vas), y lo que el corazón te pide: si algún día te pasa algo o peor si algún día muriera, por lo menos dejarle un mensaje y que ella supiera por qué partí, cuál fue la necesidad. En ese sentido era imposible dejarle una carta y decir cosas que no podíamos decir… Las letras de Silvio nos ayudaron. Me parecieron esencial Amada, Tu fantasma, explicó.
Precisamente la anécdota que contó Elizabeth sobre cómo El dulce abismo había acompañado sus días luego que su esposo, desde la cárcel le pidiera escucharla, provocó que recordaran un momento del juicio.
«Cuando empezó el juicio había tres de nosotros cuya identidad no había sido descubierta, yo me llamaba Luis Medina, Rubén Campa era Fernando y Manuel Viramontes, Gerardo. Cuando el juicio comienza nos identificamos con el nombre verdadero y ahí los fiscales se levantaron inmediatamente para buscar información… fue un impacto fuerte».
Sobre esos días iniciales de incomunicación total comentó Gerardo, quien los calificó de días «desgarradores»; las horas en las que nacieron algunos poemas que escribiera y que aún lo emocionan.
Ramón habló de poemas del alma. Foto: Abel Rojas.
Esa etapa fue «muy difícil, porque el caso es que nosotros mantuvimos por un gran número de meses las identidades que teníamos y si Ramón era Luis Medina, un puertorriqueño, y Fernando era Rubén Campa, un mexicano, y yo era Manuel Viramontes, un puertorriqueño, a quién le íbamos a escribir o de quién íbamos a recibir cartas o a quién íbamos a llamar. Fueron meses prácticamente de total incomunicación, sin saber lo que ocurría con la familia, sin saber nada.
«A veces los guardias llegaban una vez a la semana, una vez cada 15 días, no recuerdo, y ponían el teléfono en la ventanita y decían: “No vas llamar a nadie, no vas a llamar a tu familia”. Fueron meses desgarradores», apuntó.
Los Cinco también escucharon atentos las llamadas. Foto: Abel Rojas.
Aunque el más conocido como poeta es Tony todos hablaron de poesía, porque a ella se aferraron.
«Los poemas que nacieron en momentos muy duros… poemas surgidos de la nostalgia, del dolor tremendo de sentir a los seres que uno quiere y no poder oírlos. Es un dolor fuerte… A mí la poesía me ayudó mucho, la poesía y el deporte», contó Ramón, quien reveló que no ha dejado de escribir, solo que sus versos son para su esposa.
«Yo pasé por la misma situación que Gerardo y Ramón. Fueron dos años y medio sin saber de la familia y ellos no saber de nosotros… pero mi pensamiento va por vías más lógicas… digamos que la musa no visitó mi pedacito de celda», bromeó Fernando.
En otro momento, Tony comentó cómo se le habían borrado de un tirón los 16 años de ausencia. Como una suerte de «éxtasis» calificó Mirta, su madre, los días vividos desde este 17 de diciembre, mientras que Olga confesó que ese día todo volvió como una película, pero para desterrarlo y comenzar a vivir la felicidad.
Momentos especiales fueron las llamadas de Jorgito, el camagüeyano; la de Gloria la Riva, fundadora del primer Comité de Solidaridad por los Cinco en Estados Unidos, las de la gente de pueblo abrazándolos con su voz o el poema de Tony escuchado en vivo, vía telefónica, en la voz de la actriz Corina Mestre.
El saludo enviado por Ramón a sus amigos en la cárcel, que seguramente estaban escuchando el programa, fue de los minutos que reafirmaron que los Cinco son tal y como los habíamos dibujado con letras desde hace años.
«Ustedes fueron nuestra familia, nunca lo olvidamos, los queremos mucho… igual que somos fieles a la Patria somos fieles a los amigos», dijo Ramón, y los instó a no perder la esperanza.
René comentó de los esfuerzos de la solidaridad… «En ocasiones parecía imposible, pero aquí están».
«Hemos pensando mucho en todas las compañeras y los compañeros que hicieron que este día fuera posible», agregó Gerardo.
Cuando la periodista Angélica Paredes preguntó por la Cuba que los había recibido cada uno habló de «su» Cuba.
Tony: La encontré con la misma belleza, es la Cuba que yo llevaba en mi corazón, la que llevaba en mi mente.
René: Encuentro una Cuba victoriosa, y que acaba de conseguir una victoria aun más resonante todavía, una Cuba que tenemos que seguir mejorando...
Ramón: Yo veo algo especial en Cuba ahora… Yo veo que Cuba está transformándose en un proceso de cambio, de ebullición; que está en un momento de construcción importante para el desarrollo y el fortalecimiento de nuestro socialismo, y lo noto en que hay impulso en la gente.
Fernando: En Cuba hay una magia especial. Es un lugar bello a pesar de las dificultades, a pesar de que hay cosas que se han deteriorado. Hay otras que se han creado y se mantienen… Lo más bello que tiene Cuba es su pueblo.
Gerardo: La Cuba de hoy no es la misma que dejamos, pero es que tampoco debe serlo… El quid es hacer la de mañana mejor que la de hoy… Sabemos cuánto se está haciendo por romper esquemas, por inyectar nueva sangre a nuestra realidad».
Para lograr que la luz fuera aún más fuerte, otra vez, como en el concierto de Silvio, cantaron Regresaré acompañando la voz de Polo Montañez. Después, aplausos, y otra vez risas.
