El Código Penal Cubano carece de la tipificación de los delitos informáticos, realidad que debe ser modificada en tanto los perjuicios ocasionados por quienes dominan la tecnología son cada vez más comunes en el mundo actual y también en nuestro país, aseveró el máster en Ciencias Gonzalo García Pierrat, director de Organización y Control de la Oficina de Seguridad de Redes Informáticas (OSRI), del Ministerio de la Informática y las Comunicaciones.
Al intervenir en el XI Encuentro Internacional Ciencias Penales 2012, que hasta este viernes sesionará en el Palacio de Convenciones, de la capital, García Pierrat dijo que aplicaciones financieras y comerciales, cuentas de acceso a los servicios, documentos confidenciales, bases de datos, configuraciones del sistema y correos electrónicos de los directivos son, por razones económicas, políticas o de otra índole, blancos potenciales de este tipo de delito, para el que el enfrentamiento resulta muy complejo.
«El anonimato de los actores, la carencia de límites, pues se pueden cometer delitos de un país a otro; la velocidad del desarrollo y el bajo costo de las herramientas, de fácil obtención en Internet, son factores que dificultan el proceso, aunque no lo hacen imposible.
«Es imprescindible la redacción de leyes claras que se puedan hacer cumplir cuando sea necesario enfrentar delitos informáticos no contemplados en la legislación actual —que ya han afectado el funcionamiento de empresas y entidades cubanos— y propiciar la concienciación y preparación constante de profesionales de la ley e informáticos en esta materia, desde el punto de vista técnico y penal, para que el trabajo en conjunto tribute al éxito», enfatizó García Pierrot.