No puede construirse un mundo mejor si no hay desarrollo sostenible, y en ello tiene un papel fundamental el compromiso de la universidad con la sociedad, expresó Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Ministro de Educación Superior.
En un encuentro con la prensa, al término de Universidad 2012, el titular cubano significó que ninguno de los temas priorizados para las universidades en el momento actual quedó excluido. «Entre ellos la educación a distancia, modalidad de enseñanza que nos proponemos potenciar próximamente en nuestro país», añadió.
Al referirse a las tendencias actuales del debate mundial sobre Educación Superior, significó que gira alrededor de alcanzar más equidad social, inclusión, amplio acceso, elevar la calidad y la colaboración internacional. Además que se prepare mejor a los profesores universitarios —precisó—, para que sean capaces de irradiar una cultura humanística a los profesionales que van a formar.
«Lo que hoy son quimeras en otros países, para nosotros son temas logrados, aunque en este intercambio también nos nutrimos y comparamos lo que estamos haciendo, para saber si estamos en el camino adecuado», señaló.
«También se denunció el peligro que representa hoy la guerra, y se cuestionó el papel hegemónico de Estados Unidos en este mundo desordenado, argumentó. La actuación de las grandes potencias indigna a las mayorías».
El titular destacó que esta VIII edición superó las expectativas, al ser el encuentro de este tipo con mayor participación, más de 3 000 delegados, 700 de ellos cubanos. «El éxito del evento tiene que ver con el prestigio alcanzado por Cuba en la Educación Superior», afirmó.
«Sigue motivando e interesando porque hemos sido coherentes en los ejes temáticos. Hay un hilo conductor en todo lo abordado y el próximo encuentro, que estamos convocando para el 2014, proponemos que tenga como tema central la responsabilidad social de las universidades», comentó.
El Congreso Internacional contó con una amplia representatividad, puntualizó Díaz-Canel, no solo geográfica, sino de los actores fundamentales que participan en la Educación Superior, con delegados de 64 países, diez organizaciones y organismos internacionales, 13 ministros y un grupo importante de rectores.
Refirió que durante las sesiones de trabajo el debate fue franco, abierto y democrático. «Se reconoció a Cuba, a la Revolución, por el aporte desinteresado y humanista que ha brindado al mundo en materia de educación. Con ello recogemos una cosecha de amistad, solidaridad, respeto y apoyo. No faltaron voces para denunciar el criminal bloqueo yanqui impuesto a nuestro pueblo y reclamar libertad para Los Cinco», agregó.