El vicepresidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, ratificó el desconocimiento de su gobierno a las elecciones ilegítimas del domingo 29 de noviembre en Honduras, y manifestó su expectativa de que la comunidad internacional no las respalde.
En declaraciones a la prensa en la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) de La Habana, adonde acudió como parte de su visita de trabajo a Cuba, el Vicepresidente del gobierno del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) también estimó que avalar el golpe y los comicios ilegales en el vecino país hondureño sería otorgar «un cheque en blanco» a las fuerzas conservadoras de Centroamérica que buscan detener los procesos progresistas, democráticos y revolucionarios.
Todos creíamos sepultada la historia de los golpes de Estado, dijo Cerén, quien recordó que la zona ha sufrido guerras como resultado de las cuales terminaron las dictaduras.
El Vicepresidente salvadoreño también lamentó la posición que ha asumido Estados Unidos al reconocer el golpe en Honduras.
Esperamos que la Organización de Estados Americanos (OEA) y todos los países mantengan la presión para que se restablezca el proceso democrático en Honduras, afirmó.