Frente al espejo
Casualmente soy de un pueblo que está muy cerca de donde se encuentra esa señal que, como se muestra en la foto de la nota (A falta de señales, ¡un accidente! Ana María Domínguez Cruz, 28 de mayo), si sigues recto vas hacia Trinidad, y a la derecha a la playa Rancho Luna y Cienfuegos… En ese cruce o entronque de San Antón, como se conoce por aquella zona, años atrás cuando esa señal no estaba se ponían unos «listos», y como por allí pasan turistas en coches de alquiler se ofrecían para guiarlos… y así buscar una propina. No dudo que esas mismas personas hayan destrozado la señal para eso mismo que dije anteriormente. Varios accidentes ha habido en ese cruce, porque cuando vienes de Rancho Luna a Trinidad es una carretera recta, pero cuando llegas a ese lugar tienes que girar a la derecha. Como no había señal, los turistas pensaban que la carretera seguía recta y perdían el control del coche y se metían dentro de los campos de caña. En fin, que «pillen» a los malhechores y que se les aplique la ley. (Gaby)
No solo las señales, también las carreteras; si no lo creen vengan a la Isla y comprueben la carretera para Mella Vaquero, que no hace mucho la repararon y ya está «enferma» por el accionar de los buldóceres y los equipos de cultivo que cruzan por ella sin protección. (Héctor Pupo Velázquez)
A sus saludables recomendaciones, amigo Nelson (Y usted, ¿pone el bobo?, Nelson García Santos, 28 de mayo), sobre el lavado de manos, para que estas no queden como la conocida frase, dicen que dicha por Poncio Pilato, habría que agregar otros focos de infección como la acumulación de basura por falta de recogida de la misma. La de agua, muchas veces ya podrida, en lugares públicos, que por meses se mantiene como alimentación de todo tipo de peligrosas bacterias contaminantes para el medio ambiente y por ende la salud humana. Tampoco se debe permitir que las carnes, todo tipo de estas, se expongan y vendan a la intemperie, sin la refrigeración adecuada, y casi siempre rodeadas de moscas portadoras de peligrosas enfermedades, las cuales no se evitan con un simple y bien intencionado lavado de manos. Y sí, la higiene es muy importante, pero no solamente en nuestro cuerpo, sino en todo lo que nos rodea, porque si no casi que de nada valdría, ni aunque usáramos guantes.(Modesto Reyes Canto)