Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Al abordar irregularidades en la atención por parte del Instituto de Planificación Física (hoy Instituto de Ordenamiento Territorial y Urbanismo), Gisela Delgado Ramírez (Calle 23 no. 5004, entre 50 y 52, Cienfuegos) opina que resulta penoso y degradante que en la base no se cumplan las legislaciones aprobadas por las distintas instancias del país.

Ella cuenta que su padre, Pablo Rubén Delgado Sanabria, residente en el Consejo Popular de Reina de esa ciudad, es un anciano de 84 años que presentó desde el 18 de enero de 2021 en la Dirección Municipal de Planificación Física de Cienfuegos la solicitud para el pago del terreno junto con la resolución de propietario de su vivienda (copia original); pues se trataba de una construcción ilegal en un terreno estatal, trámite número 181/2021. Luego, y en varias ocasiones, ella se presentó en esa institución, e hizo sistemáticamente llamadas, preocupándose por el expediente y por el trámite. Y siempre obtuvo por respuesta que no estaba. Y después, le informaron que estaban cerrados por la COVID-19 y no atendían a la población.

En noviembre de 2021, cuando se reabrieron los trámites, por fin ella recogió el documento donde explican qué hacer, y el cálculo del valor a pagar por el terreno donde se construyó la vivienda. Se llenó el modelo CR-09 de la ONAT y se hizo el pago en el banco del importe resultante.

El 29 de ese mes se entregó al Departamento que correspondía una copia del CR-09 y el documento del valor. Y la especialista que recibe los trámites le informó que transcurridos 15 días podía recoger todo el expediente. El 15 de diciembre se presentó de nuevo, y la enviaron a la oficina de trámites. No estaba aún, y le dijeron que debía esperar.

A mediados de enero de 2022 Gisela se presentó de nuevo, y le informaron que el documento estaba confeccionado como Oficio No. 3242 de fecha 30 de diciembre de 2021, pero que faltaba la firma de la directora. Y ella solicitó ser atendida por el Departamento de Atención a la Población de esa entidad. Quien la atendió ratificó que ya estaba el documento, y pendiente de firma.Que se presentara la próxima semana para recogerlo.

«Yo soy trabajadora y realmente no puedo estar ausentándome con tanta frecuencia. Me personé nuevamente el 11 de febrero de 2022, a más de un año de haber presentado el expediente a la Dirección Municipal de Planificación Física. Me anotaron en una lista que se hace en la parte de afuera y esperé. Al poco rato salió una compañera y me comunicó que debía esperar, que mi documento no estaba ahí.

«Poco tiempo después y en la puerta de la calle de la institución, se personó la secretaria de la Directora y, sin privacidad de ningún tipo, delante del público presente y con mala compostura, me entregó un pedacito de papel donde me exponía que el tramite salió el 20 de enero de 2022 y que regresara de nuevo el 5 de febrero de 2022. Y nada más, sin explicar cuál fue la situación por la que salió y entró de nuevo; qué fue lo que pasó y de quién era la responsabilidad.

«Salí de allí bastante inconforme, y me presenté en Atención a la Población de la Dirección Provincial de Planificación Física. La compañera que me atendió procedió a llamar a su homóloga del municipio y no obtuvo respuesta alguna. Me llenó la queja que presenté y salí sin respuesta alguna de esa Dirección Provincial».

El 14 de febrero de 2022 ella se presentó en el Poder Popular Municipal de Cienfuegos, en la sección de Atención a la Población, desde donde llamaron a la Dirección Municipal de Planificación Física. Y el resultado fue el mismo: ninguna respuesta a su queja.

«Qué otra gestión o trámite puedo hacer, dice, si ya he agotado todos los lugares e instituciones a los que debía acudir para resolver el problema sin obtener la respuesta esperada. Increíble, pero no se ha resuelto nada. Dicho trámite está presentado desde el 18 de enero de 2021 aún sin procesarse, sin respuesta a un anciano de 84 años maltratado y en espera de poder tener su título de propiedad legalizado. Y con temor a que se extravíe. El nivel de agotamiento y angustia por la cantidad de carreras y trámites realizados colmó la copa», concluye.

Da vergüenza pública tanta burocracia.