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Inclusión: directa a la meta

Las EIDE del país también tienen estudiantes en situación de discapacidad, así se evidencia en la de Holguín, donde cuatro deportes los incluyen en sus matrículas

Autor:

Nelson Rodríguez Roque

HOLGUÍN.— A Daniela Zayas, Yerandi Claro y Raidel Moreno los atacó un virus en medio de la edición 60 de los Juegos Escolares Nacionales, pero salieron de la indisposición, compitiendo en el atletismo, efectuado en tierras camagüeyanas, de donde regresaron Zayas y Claro con medallas, y Moreno casi alcanzó presea en 80 metros planos.

De la salvaguarda, promoción y aseguramiento del pleno ejercicio de derechos de personas en situación de discapacidad también hay conciencia en la Escuela de Iniciación Deportiva Escolar (EIDE) Pedro Díaz Coello, la cual incluye a pequeños y pequeñas con dicha condición, quienes pudieran ser los próximos Oscar Pupo Cortina, Yanelis Silva, Ulicer Aguilera o Sheyla Hernández.

El exdecatlonista Félix Campañá, entrenador de campo y pista allí, opina que «con estos niños y niñas hay que trabajar lo anímico siempre, pero no se les puede sentir lástima, entrenándolos igual de constante que a atletas convencionales. Por mis manos, desde que llegué a aquí en2018 con Ulicer Aguilera, han pasado varios, algunos promovidos al equipo nacional.

Félix Campañá entrenó al jabalinista Ulicer Aguilera, bronceado en París 2024. Fotos: Nelson Rodríguez Roque

«Son talentosos, porque ahí está su potencial, que debe impulsarse aplicando disciplina y buscando madurez en aspectos deportivos y de vida. Los tres le han tomado amor a la escuela, en la cual van dedicándose más, soñando verse en el futuro en el concierto nacional e internacional entre discapacitados, cuyo desarrollo los estimula».

La adolescente del reparto Emilio Bárcenas, en la cabecera territorial, aspira a representar a Cuba en la Sordolimpiada de 2025, si sus tiempos en el
hectómetro y los 200 metros —es campeona de Cuba en ambas distancias— ascienden por ranking. Mientras los pequeños, ambos de 13 años de edad, incursionan en velocidad y salto de longitud, como parte de su segundo curso en la EIDE nororiental.

Si algo se lleva de tarea Rocío Fernández, alistada por Norge Luis Vega, es el «peloteo». La manera de trasladar la pelota a la otra mitad de la mesa de ping pong y defender luego la tienen encantada. Su primer curso en la institución holguinera, donde cursa el 6to. grado, ha ido desarrollándolo con mucho poder de adaptación, pues es resuelta en áreas docentes y deportivas. Las reglas de su disciplina va comprendiéndolas, y en el aula ha encontrado amigos y amigas.

Las reglas de su disciplina va asimilándolas Rocío Fernández. Fotos: Nelson Rodríguez Roque

Eliécer Coira, cuyo profesor de bádminton, José Luis Rojas, significa sus ganas de entrenar en el tabloncillo, golpea volantes durante hora y media cada mañana, cumpliendo ejercicios específicos de su edad y modalidad. Él también es nuevo ingreso en la Pedro Díaz Coello, tras su captación durante el pasado período lectivo.

Extraña el fútbol que jugaba con sus compañeritos en la Primaria, pero se siente bien atendido y recibido por el colectivo. Todavía le falta conocer a Manuel Alejandro Bravo, otro badmintonista discapacitado, que se recupera de una intervención quirúrgica y hace el esfuerzo desde casa, para estar al día en sus lecciones de Secundaria Básica.

Como la matrícula del centro continúa abierta, una plaza del judo la ocupará un niño moense, según le informaron a JR en su visita al gimnasio de ese deporte, en el que se formó Sheyla Hernández, subtitular paralímpica de París 2024. Integrantes de su cátedra planifican incrementar el número de estudiantes con dificultades visuales o del habla y la escucha, y organizar certámenes para identificar posibles promociones.

A muchos de nosotros nos es novedoso que las EIDE del país igualmente tengan en cuenta a infantes en situación de discapacidad (hay que aumentar en Holguín los provenientes de más allá de los límites del municipio cabecera), asimilándolos como sucedía en concentrados preparatorios o fechas de eventos, rodeados por la «tía» del comedor, el veterano jardinero o la sicopedagoga, en el día a día.

Es de admirar que justicia social e inclusión extiendan el hogar hasta pistas y tabloncillos, amando el tiempo de los intentos, nunca fallidos en la obra que nos ocupa.

Daniela Zayas, Yerandi Claro y Raidel Moreno regresaron de Camagüey con buenos resultados. Fotos: Nelson Rodríguez Roque

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