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Dezirett de la Caridad Madan, de 19 años, aportó a su equipo su experiencia internacional. Autor: FIVB Publicado: 11/05/2022 | 10:00 pm
El pasado lunes concluyó en el agramontino Auditorium Iván Hidalgo Funes el Campeonato Nacional de Voleibol femenino, un torneo casi relámpago (solo cinco días duró la competencia) aunque con desafíos que hablaron muy bien de la buena salud de la disciplina en algunas provincias del país.
Por supuesto, el elogio va fundamentalmente dirigido a los conjuntos La Habana y Camagüey, quienes protagonizaron una final de infarto que mantuvo a las capitalinas como campeonas del certamen, aun cuando las anfitrionas las obligaron a dar el extra en un quinto set para llevarse la corona 3-2 (25-21,
25-20, 21-25, 18-25 y 15-13).
Entretanto, en el pleito por la medalla de bronce, Cienfuegos era mejor que Granma en cuatro parciales (25-18, 20-25, 25-17 y 25-12).
Más allá de resultados en los marcadores, del podio y sus ocupantes y de un cuadro de honor abultado que destacó individualidades dentro del campeonato; la lid también mostró otros perfiles merecedores de alabanzas.
Primero, el accionar sobre el tabloncillo del plantel de las giraldillas, quienes no solo mantuvieron su título del pasado torneo, sino que, además, lo hicieron en calidad de invictas; después, el debut por todo lo alto de la entrenadora Hany Aguirre en la primera categoría y se les suma el excelente trabajo de la opuesta habanera Dezirett de la Caridad Madan, no por casualidad seleccionada jugadora más valiosa de la justa.
De acuerdo con un reporte de Prensa Latina esta joven y prometedora jugadora, que antes de marzo pasaría a firmar con el club Uralochka NTMK Ekaterinburg, de Rusia, mantiene latente sus expectativas para lo que será su primer contrato profesional en Europa.
Sobre el tema de las contrataciones fuera de fronteras de atletas cubanas, añade PL que la Federación Cubana de la disciplina tiene entre sus principales estrategias la inserción de varias jugadoras en equipos élites, tanto en nuestro continente como en Europa, con el fin de conformar el equipo nacional con miras a los torneos clasificatorios para los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 2023 en San Salvador.
De ahí que la Comisión Nacional de Voleibol anunciara la realización de un monitoreo en La Habana para finales de mayo, para elegir a las 20 atletas que compondrán la escuadra antillana con miras a la Copa Panamericana de México a celebrarse en agosto venidero, a la que le seguirá un evento en septiembre a disputarse en República Dominicana.
