En la despedida, Bruzón logró la igualada. Autor: US Chess Publicado: 14/03/2018 | 08:55 pm
Cuando falta la última ronda y teniendo en cuenta el nivel mostrado durante las jornadas previas, era muy difícil que el estadounidense Jeffery Xiong (2640) renunciara a llevarse a casa el trofeo del torneo cerrado Spring Chess Classic, que concluyó ayer en la ciudad estadounidense de San Luis. En su última presentación el local no quiso depender de nadie y dejó las cosas muy claras sobre por qué es uno de los principales talentos emergentes de este deporte en su país, tras sellar su actuación con triunfo.
Como conductor de las piezas blancas, el jugador de 17 años derrotó este miércoles a su coterráneo Alexander Onischuk (2681), primer preclasificado del torneo, en 38 movimientos de una Apertura Catalana, que le permitió ser el único trebejista capaz de lograr 6.5 unidades. Xiong, campeón mundial juvenil en 2016 e igualmente titular ese año en el apartado Premier del Memorial Capablanca en Cuba, se despidió con cuatro triunfos, cinco empates y no perdió.
El representante cubano en esta fuerte lid, que reunió a diez Grandes Maestros, fue el tunero Lázaro Bruzón (2673), quien terminó en la quinta plaza con 4.5 puntos, después de acordar con trebejos claros el armisticio con el anfitrión Varuzhan Akobian (2640) en 30 desplazamientos de una Defensa Francesa. Akobian culminó con media unidad más que el antillano, al igual que el polaco Dariusz Swiercz (2654) y el estadounidense Samuel Shankland (2668), ocupantes de los escaños del dos al cuatro.
Bruzón, número uno de la Isla entre los jugadores activos, alcanzó un registro de siete igualadas, una derrota ante el local Yaroslav Zherebukh (2633), —en la Copa del Mundo de 2011 derrotó en las dos primeras rondas a excelentes ajedrecistas como Pavel Eljanov y Shakhriyar Mamedyarov—, mientras que su única victoria la alcanzó en la séptima ronda contra el indio Surya Shekhar Ganguly (2657), integrante en seis ocasiones del equipo olímpico de su país.
Su desempeño en esta lid bien puede decirse que fue una copia fiel a la actuación de la edición precedente, cuando terminó en la quinta posición con idéntico acumulado y las mismas decisiones, en tanto el título correspondió a Akobian, ahora cuarto.