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Lázaro Bruzón debutó con tablas. Autor: Tomada de Cubadebate Publicado: 06/03/2018 | 09:03 pm
A los que se quedaron, como yo, con las ganas de ver estrenarse a Lázaro Bruzón (2673) esta temporada en el festival ajedrecístico de Gibraltar a finales de enero, este martes llegó el momento de disfrutar por primera vez al tunero moviendo los trebejos en la arena internacional. El número uno de Cuba entre los jugadores activos y ubicado en el escaño 68 del ranking mundial, comenzó su periplo en un torneo cerrado, el Spring Chess Classic, que organiza el club de San Luis, en Estados Unidos.
En la lid participan un total de diez jugadores, todos con el máximo título, y se desarrolla bajo el sistema de round robin a una vuelta, por lo que serán nueve las rondas que se desarrollarán hasta el próximo miércoles. El promedio general del torneo es de 2652 puntos, la mitad de los concursantes están incluidos entre los cien mejores del orbe, mientras que nuestro representante es el segundo preclasificado, detrás del nacionalizado estadounidense Alexander Onischuk (2681), quien es oriundo de Ucrania.
El tunero, quien logró el cetro mundial juvenil en Armenia 2000, en su primer compromiso obtuvo tablas con piezas negras, después de 36 movidas, ante el anfitrión Samuel Shankland (2668), un trebejista de 26 años ubicado en el sexto puesto del escalafón de su país y que en 2008 culminó con la medalla de bronce en el certamen del orbe para menores de 18 años, además de ser uno de los miembros del equipo olímpico estadounidense que en 2016 logró llevarse la corona después de 40 años.
Hoy el antillano en su segunda salida moverá las piezas claras y tendrá como adversario al francés Edouard Romain (2613), quien se proclamó campeón de su país en 2012, junto a tres jugadores, e igualmente, dos años después, terminó primero en el importante Open de Dubai.
El seis veces titular de Cuba repite su participación en este fuerte torneo cerrado, debido a que el año pasado terminó en el quinto escaño, gracias a un acumulado de 4,5 unidades, producto de un éxito, siete tablas y una derrota.
