La cubanitas consiguieron 20 bloqueos. Autor: NORCECA Publicado: 21/09/2017 | 05:53 pm
Como no se le pueden pedir peras al olmo, tampoco mucho más de lo hecho al actual equipo femenino cubano de voleibol, que ha encarado el presente Grand Prix con una nómina donde la juventud y la falta de roce pasan factura en cada salida a la cancha. Y aunque este sábado sufrió su séptimo desliz en el torneo, hay que reconocer que su prestaciones han mejorado notablemente en los últimos tres partidos.
Una vez más salieron airosas las peruanas, pero ahora tuvieron que llegar al límite para apuntarse el éxito con marcadores de 27-25, 28-30, 25-23, 22-25 y 15-13. Otra vez el estratega Juan Carlos Gala alineó a Regla Gracia como titular en el puesto de auxiliar y la muchachita respondió con 20 puntos. Ese aporte, más los notables desempeños de las centrales Alena Rojas y Daymara Lescay —ambas con 14 unidades y 12 bloqueos repartidos a partes iguales— fueron el complemento necesario para otra extraordinaria actuación de la jovencita Melissa Vargas, máxima anotadora del partido con 25 rayitas.
Pero más allá del plano individual, son destacables las mejorías en los índices de recepción y saque, más algunas respuestas en situaciones límites como la extensión en la segunda manga, y la remontada en el cuarto parcial, cuando perdían por 17-22 y consiguieron ocho puntos seguidos para forzar el tie break.
Para hoy está fijada la despedida, nada menos que frente a las anfitrionas argentinas. Será una nueva oportunidad para demostrar que este equipo tiene gasolina en el tanque y camino por recorrer.
Desde adentro
La zurda Regla Gracia asumió como titular desde el fin de semana anterior y se ha ganado el puesto gracias a su rendimiento y efectividad en cada partido. La noche de este sábado no fue la excepción.
«Estamos muy contentas porque pudimos haber ganado, sabemos que tenemos elementos que mejorar, pero el pueblo puede confiar en nosotras, que seguiremos avanzando y lograremos llevar el voleibol muy lejos. Esto es lo que nos hace falta, la experiencia de jugar así, con equipos de nivel y bajo esta presión de torneos importantes y con un graderío repleto ya sea a favor o en contra», dijo la muchachita a Lisset Ricardo, enviada especial de JIT.
«Todo está en el empeño que pongamos cada día en el entrenamiento y que tengamos un régimen competitivo estable. Seguro que continuaremos avanzando y llegaremos muy lejos; estoy contenta por estar ayudando a mi equipo y haber respondido a la confianza que depositaron en mí y seguiremos preparándonos para los próximos compromisos de este año», señaló la camagüeyana de 21 años refiriéndose a la Copa Panamericana sub-23, el mundial de mayores y los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz.