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Meriño, de 37 años y subcampeón olímpico en Beijing-2008, bateó cuatro cuadrangulares en la serie de tres partidos ante Granma para colocarse a la cabeza de los sluggers.
El enmascarado santiaguero sacó una pelota del parque el sábado anterior ante el derecho Ciro Silvino Licea y en el doble juego dominical sumó otros tres batazos de vuelta completa para relegar a un segundo plano a sus perseguidores.
La racha del veterano catcher se inició a finales de diciembre, al extremo de pegar ocho batazos más allá de las cercas en los últimos ocho partidos de su equipo.
Después de Meriño aparece otro receptor, el espirituano Yenier Bello, quien acumula siete y tiene otro sellado, tras el aplazamiento del choque de la jornada anterior ante Cienfuegos por problemas con el alumbrado del estadio 5 de septiembre.
El paso de Bello también sorprende a aficionados y especialistas, quienes lo consideran, junto a Meriño, como fuerte candidato a integrar el equipo al II Clásico Mundial, previsto para marzo próximo.
En la porfía por el liderazgo de los jonroneros aparece también el receptor pinareño Yosvani Peraza, segundo máximo artillero la temporada pasada, después del jardinero santiaguero Alexei Bell.
Peraza, que quedó fuera en el último momento del equipo a Beijing-2008, acumula seis conexiones del lado de allá de las bardas, la misma cantidad que el tercera base espirituano Yulieski Gourriel.
Otro jardinero, el granmense Alfredo Despaigne, y el primera base cienfueguero José Dariel Abreu, también andan por seis, mientras un grupo numeroso los acecha con cinco vuelacercas.
Mañana, martes, comienzan nuevas series particulares y Santiago de Cuba recibe en el Guillermón Moncada al maltrecho pitcheo de Cienfuegos, en una buena oportunidad para que Meriño extienda su racha de jonrones.
