No se rompan el cerebro buscando una respuesta creativa. Nick Chipman lo asume: solo quiso divertirse. Y para ello, este chef estadounidense de 32 años, se propuso crear un sándwich con 26 ingredientes diferentes, cuyos nombres empiecen con todas las letras del abecedario. Así, este plato, conocido por ser uno de los menos saludables del mundo, tuvo de todo, desde tradicionales componentes como jamón, queso y lechuga hasta otros no tanto como fideos, aguacate y calabacín. Resultó ser un bocadito tan grande que Chipman apenas tuvo tiempo para tirarle una foto antes de que se desmoronara.