Un albañil australiano cazó con sus propias manos un tiburón de poco más de un metro gracias a las copas que se había tomado antes de salir de pesca con sus amigos. Philip Kerkhof, de 41 años, se metió sin pensarlo en el agua y persiguió al escualo hasta agarrarlo, pelear con él y subirlo al barco, ante la mirada atónita de sus compañeros. Kerkhof, quien solo sufrió un desgarro en los pantalones, dijo posteriormente que no se había dado cuenta de «la bobería» que cometió hasta que despertó al día siguiente. Y eso que, dijo, solo tomó... unos traguitos de más. En otra ocasión, quizá despierte en el estómago de un bicho...
ACONDICIONADOR PECULIARUn peluquero británico está ofreciendo a sus clientes un tratamiento para acondicionar el cabello, a partir de un ingrediente bastante original: semen de toro. Ahora los clientes de Hari Salem, quien combina la secreción con raíces vegetales ricas en proteínas, pueden acceder a esta terapia que dura 45 minutos y consiste en la aplicación del «singular» preparado con suaves masajes. El estilista reveló además que el semen es refrigerado antes de ser usado, carece de olor, y deja el pelo increíblemente suave y con volumen. Quizá su lema es: «viscoso, pero esponjoso».
ASEO PELIAGUDOUn anciano chino que no se lavaba el cabello hacía 26 años, decidió poner fin a su racha y precisó la ayuda de doce personas para asear su melena de 1,83 metros de largo. Se trata de Luo Shiyuan, de 80 años, quien aprovechó también para acicalar su barba de 1,52 metros. Dada la dimensión de su luenga cabellera, el champú no logró su efecto revitalizador, por lo que utilizaron detergente en polvo, aunque así y todo necesitaron tres paquetes para higienizar de una buena vez a Luo. Menos mal que antes no se le ocurrió pelarse, porque de seguro habría hecho falta... ¿una sierra eléctrica?