Las Romerías movilizaron a jóvenes creadores de diversas naciones. Autor: Amauris Betancourt Publicado: 21/09/2017 | 05:20 pm
Todavía permanece el eco de la música que la víspera invadió la parte moderna de Holguín, como parte de la última jornada del evento de hip hop y las Rockmerías, y la capital del arte joven ya se prepara para organizar en mayo próximo la vigésima edición de la cita cimera de la Asociación Hermanos Saíz (AHS).
Presentada la convocatoria de la 20 Romerías de Mayo, que tendrá lugar como de costumbre en los días iniciales del quinto mes de 2013, otra vez espacios como Babel, La cámara azul, Palabras compartidas, los encuentros Internacional de Teatro Callejero y Nacional de Danza en Paisajes Públicos, así como Memoria Nuestra, atraerán de seguro a los creadores más sobresalientes de la AHS de todo el país y a delegados de diversos países.
Y nuevamente Memoria Nuestra, columna vertebral de este Festival Mundial de Juventudes Artísticas, entregará su codiciado premio entre los jóvenes investigadores de la Isla, que en esta ocasión se otorgó en dos categorías: investigación y proyecto.
El primero recayó en Leodanis Torres Barrero y Yoiner Díaz Rodríguez por Un proceso cultural cubano: Del determinismo jurídico al derecho antropológico en la República (1901-1953); mientras el segundo fue a parar a manos de Carlos Manuel Gámez Ramírez, por B.M.N.: Preparen, apunten. La ciudad en el imaginario bayamés contemporáneo.
Memoria Nuestra se consolidó como el evento que más propició el intercambio intergeneracional y que sigue indagando en el pasado para continuar trazando el presente y moldear el futuro.
De ello da fe, en nombre de los 35 investigadores de 12 provincias que participaron con 27 trabajos, la joven Yuset Sánchez Kindelán, reincidente en sus visitas a Holguín, donde ganó un premio (2009) y una mención (2011) a partir de sus indagaciones sobre el Santiago de Cuba del siglo XVII.
«Es que se trata de un evento donde quienes comenzamos en este campo nos damos el lujo de interactuar con figuras consagradas, a quienes podemos manifestarles nuestras ideas y nos escuchan, nos conducen. Aquí, donde prima la calidad, el diálogo es ameno y enriquecedor».