Alejandro Enrique González, Mailee Rodríguez y Víctor Manuel Ruiz hicieron suyos un improvisado escenario donde sobraron las ovaciones. Autor: Del Autor Publicado: 21/04/2025 | 07:24 pm
SANCTI SPÍRITUS.— Bastó una sugerencia, apenas el inicio de un diálogo entre quienes le dan vida al proyecto Ebenezer y quienes tensan las riendas de la Facultad de Ciencias Técnicas y Económicas de la Universidad de Sancti Spíritus José Martí (UNISS), para aceptar el reto de salir fuera de los perímetros de la casa de altos estudios a esparcir alegrías.
«Acudimos al llamado y aquí estamos. Pero no quisimos que solo estuvieran nuestros estudiantes, sino que convocamos a las empresas del territorio que tienen vínculos de trabajo estables con nosotros. Después de la primera actividad sentimos que la idea ha calado porque ya son varias las que nos han pedido sumarse», cuenta Carlos Lázaro Jiménez Puerto, decano de la referida facultad.
Y no resulta difícil porque Acualina y Jeringuilla, dos simpáticos personajes que se apropian de la técnica del clown para robar la atención de los públicos, enamoran hasta las más hieráticas personalidades. Ellos son los protagonistas de los encuentros que, entre canciones, juegos de participación y mensajes de bien público forman valores humanos.
«Ebenezer promociona mucho la obra martiana, sobre todo los textos de La Edad de Oro. Quizá las personas no imaginen que si se hace una adecuada promoción logramos atrapar la atención y los públicos, que no son solo niños y niñas, van a las páginas de los textos que compartimos. Hemos trabajado mucho con los títulos del escritor espirituano Abel Hernández Muñoz, defensor, como nosotros, del cuidado del medio ambiente», aclara Mailee Rodríguez Estévez, quien le da vida a una pequeña llena de colores y fantasías.
Arte colorido
Precisamente, la raíz de ese proyecto que desde hace unos meses tiene cobija en la sala de extensión de la Biblioteca Provincial Rubén Martínez Villena, de Sancti Spíritus, también se encuentra en la principal institución de la provincia perteneciente a la Educación Superior. Rodríguez Estévez estudiaba la Licenciatura en Comunicación social cuando descubrió en una actividad de su práctica laboral la magia al dialogar con los públicos.
«Eso fue en la zona de La Rotonda, de la urbe del Yayabo. Luego llegamos a la institución educativa Mártires del Granma. Lo experimentado en ambos momentos fue esencial para apostar por crear el personaje, y desde las manifestaciones artísticas, de una forma diferente, dejar mensajes que contribuyan a que nuestros públicos sean mejores seres humanos».
Luego se le unió el joven de 22 años Víctor Manuel Ruiz Valdivia, su partner, incluso más allá de las ocurrencias de los personajes, se atrevieron a hacer realidad un sueño en común: «El mensaje que nosotros transmitimos no solo es de alegría, de música, sino también de unión en tiempos difíciles, de descubrir la literatura y sus maravillosas enseñanzas».
Antes de laborar ambos en la Biblioteca Provincial de Sancti Spíritus, ya Acualina y Jeringuilla se habían robado más de una ovación.
«Hemos estado en varias localidades cercanas al centro de la urbe espirituana, así como en escuelas, hogares de ancianos y en el de menores sin amparo familiar. Lo mejor siempre resulta cuando nos devuelven las sonrisas sinceras», alega Rodríguez Estévez mientras los ojos se humedecen.
Junto a ese premio, hace muy pocas horas, el impacto de Ebenezer traspasó los perímetros de la institución cultural, donde se resguarda la mayor colección de libros en esta tierra y los lugares hasta donde han tocado los corazones: mereció uno de los premios del 28vo. Seminario Taller de Promoción de la Lectura.
«Aunque no somos profesionales del teatro, cuidamos mucho la entonación, respetamos las pausas según los signos de puntuación. Nos lo exigimos por respeto al arte y por quienes nos disfrutan. Somos un equipo realmente», acota el joven quien también incursiona en el grupo dramático Hugo Hernández, de Radio Sancti Spíritus.
De números a actuaciones
Alejandro Enrique González Simón, estudiante de 1er. año en Ingeniería Industrial, se apropió de unos de los trajes, peluca y nariz de Jeringuilla. Subió al improvisado escenario de la institución educativa Protesta de Jarao, perteneciente a la enseñanza especial, y siguió con fluidez la química de los otros dos personajes. Frente a él sonrisas bisoñas le confirmaron que no estuvo errado dejar detenido por un rato el estudio y cruzar hasta uno de los extremos de la ciudad.
«Ha sido maravillosa la sensación. ¡De pichón de ingeniero a actor! —y deja escapar una sonrisa con más nervios que con acordes de alegría—. Ya hemos planificado hacer este tipo de actividad una vez al mes. Los estudiantes que no vinieron porque tenían otros compromisos en la Facultad sí aportaron en la recogida de los pequeños obsequios que pretendemos entregar cada vez que culminemos un encuentro: lápices, libretas, cuadernos de dibujar... todo lo que contribuya a que ellos se motiven a seguir indagando sobre los mensajes que compartimos, ya sea de un libro o de una obra de teatro. Todos los estudiantes estamos muy motivados con esta idea tan bonita, aunque parezca que poco tiene que ver con nuestras carreras».
Justamente, en lograr que los futuros profesionales espirituanos concienticen la trascendencia del trabajo social desde cualquier ámbito resulta uno de los objetivos de la vinculación de la UNISS con Ebenezer.
«El trabajo de la universidad es más que estar sentado en un aula haciendo ciencia. Tenemos que ir a las comunidades. Hay otros ejemplos como cuando estuvieron en el hogar de ancianos, donde contribuyeron con acciones de limpieza y peluquería. Lamentablemente, muchas veces, priorizamos la parte académica y descuidamos esos otros vínculos vitales para lograr sus formaciones», reconoce Jiménez Puerto, joven con muchos reconocimientos en la institución espirituana.
El experimentado directivo Eliécer Chirino López, director de Operaciones y comercial de Taxis-Cuba en la provincia, agradece asistir a la primera actividad. Su entidad tiene muchos kilómetros en proyectos de impacto social al garantizar el traslado de pacientes hemodializados.
«Aquí se labra el presente y futuro de nuestra sociedad. Ideas como estas me confirman que miramos desde el punto de vista adecuado».
Como él, también compartieron con los pioneros y profesores de la escuela Protesta de Jarao trabajadores vinculados con la confección de los ecomóviles, operados por la empresa militar industrial Francisco Aguiar Rodríguez. Después de compartir juegos con Acualina y Jerinquilla, los deseos de dar una vuelta en uno de esos vehículos se robaron la atención de todos los menores de edad.
«Los más importante es que estos jóvenes apuestan por sembrar amor en tiempos tan complejos», alega Marielis Castro González, testigo de cómo se les dan vida aquí a esos medios.
Ya en la Facultad de Ciencias Técnicas y Económicas de la UNISS se prepara el próximo encuentro, al que muchos más estudiantes se sumarán a la algarabía de los personajes esculpidos con la técnica del clown.
«Ya forman parte del equipo la Empresa Provincial de Transporte, la Unidad Empresarial de Bas (UEB) Frutas Selectas, el Grupo Empresarial de Comercio, la División TRD, la Empresa de Acopio y Beneficio del Tabaco, con los que ya tenemos coordinado hacer un círculo de interés en la comunidad de El camino de las cañas para fomentar el interés por la cosecha del tabaco. Sin dudas, ha sido una experiencia muy interesante, primero por el impacto entre nuestros estudiantes y por la unión con los actores empresariales por un mismo bien: formar valores y regalar alegrías», concluyó el joven Doctor en Ciencias de la Educación.