La juventud como protagonista del 11no. Congreso de la UJC. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 23/12/2019 | 10:00 pm
CABAIGUÁN, Sancti Spíritus.— Desterrar de una vez y por todas el fraude académico, una mala hierba que ha querido acomodarse en los últimos años en el sistema educativo cubano, mantiene en vela a no pocos estudiantes y profesores, en su mayoría militantes de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), según trascendió en la asamblea municipal de balance 11no. Congreso de la organización en este territorio.
El estudiantado y sus docentes conocen al dedillo que ese delito trae consigo graves consecuencias, porque se le entrega a la sociedad un profesional sin el conocimiento real. Por ello aplaudirlo o hacerse el de la vista gorda no encaja en los preceptos de nuestra nación ni en los valores que defiende la vanguardia política juvenil.
Sin tapujos lo dijo así en la cita juvenil Yoel Alejandro García González, estudiante de la escuela pedagógica Vladislav Volcov, de Cabaiguán, donde se insiste en revertir las prácticas que generan el fraude. A su juicio, quienes intentan hacerlo y logran no ser detectados es porque no están seguros de sus saberes, en ocasiones fruto de fisuras en los mecanismos educativos.
Por tanto, señaló, reactualizar los métodos de acuerdo con el contexto escolar se convierte en la palabra de orden para su plantel, como sistematizar el movimiento de monitores e incrementar la preparación metodológica para presentar clases con mayor calidad.
Dicho planteamiento tiene sus antecedentes en un suceso que trascendió los perímetros cabaiguanenses, cuando en la última prueba ministerial de duodécimo grado de Matemática se detectó un fraude casi masivo en el preuniversitario Nieves Morejón, de esa localidad. Fue un hecho que no quedó impune y que ha permitido redoblar el control, de acuerdo con el debate de la asamblea municipal de balance, para que junto a las familias exista tolerancia cero a ese delito.
Otra preocupación de la militancia en Cabaiguán está relacionada con las labores de saneamiento, a partir de la presencia en varias zonas de ese municipio del caracol africano y el mosquito Aedes aegypti. Así lo evidenciaron Alberto García, estudiante de 5to. año de Medicina, y la egresada de esa especialidad Rosmary Jiménez, quienes se han sumado a no pocas acciones para erradicarlos.
Para ambos el empuje juvenil resulta esencial en el empeño por erradicar las consecuencias que dejan esos transmisores de enfermedades y para que las personas concienticen que no se trata de un combate, sino de una batalla sistemática para prevenir que se propaguen.
Esas intervenciones y otras de igual interés centraron la atención acompañadas con múltiples flashazos de celulares, emulando para ver quiénes eran los primeros que compartían en Facebook los criterios de sus colegas. Una realidad que llamó la atención de Dainier Marcelo Sansaricq, director de la emisora municipal La voz de Cabaiguán, quien alertó de la necesaria preparación de la juventud para navegar con seguridad por las diferentes redes sociales.
Para este líder, el nuevo espacio, más que provocar ruidos en las formas de pensar y comportarse de la juventud por dejarse arrastrar por expresiones totalmente falsas y ajenas a nuestra idiosincrasia, resulta vital para exponer la realidad de una organización que tiene que parecerse siempre a su contexto: renovador, auténtico y lleno de bríos.