SAN JOSÉ DE LAS LAJAS, Mayabeque.— Si bien no es uno de los territorios más dañados por la sequía extendida a todo el país, Mayabeque tiene sus embalses al 45 por ciento de su capacidad total y toma medidas de aprovechamiento y ahorro de agua ante el efecto de las escasas precipitaciones en los últimos meses.
«La situación más crítica se manifiesta en las cuencas El Gato, en Catalina de Güines; Melena-Nueva Paz y Batabanó», explicó Pedro García, director de la UEB Servicios Técnicos, de la Empresa de Aprovechamiento Hidráulico en la provincia. Además, refirió que algunas de las siete presas existentes en esta joven provincia han bajado sus niveles del líquido.
Sobre esta situación, García añadió que la más crítica es Aguas Claras, en Bejucal, al 21 por ciento de su llenado; Canasí, en Santa Cruz del Norte, al 47 por ciento, y La Ruda, en San José, al 38. «De modo distinto ocurre al norte del territorio, donde las presas Jaruco, Jibacoa y San Miguel evidencian un estado favorable, con alrededor del 95 por ciento de su capacidad, pues son las menos explotadas», acotó.
Junto con las medidas que en Mayabeque toma la Empresa de Aprovechamiento Hidráulico, como son la aplicación del programa de reducción de pérdidas y la rehabilitación de redes y supresión de salideros, el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) también implementa otras acciones para eliminar fuentes contaminantes que puedan perjudicar la calidad del agua.
Yaneisy García Bozada, directora provincial del Citma, indicó que la sobreexplotación de la zona sur ha conllevado a procesos de salinización. Por ello, comentó, «estamos desarrollando el proyecto Mangle Vivo, que pretende la siembra de este árbol en toda la región para así beneficiar la agricultura».