SANTIAGO DE CUBA.— Con la producción de más de 7 200 toneladas de maíz y unas 330 de frijol, cifras que representan el sobrecumplimiento de lo planeado hasta la fecha, esta provincia realiza otro aporte a los empeños nacionales de sustituir las importaciones de granos.
El ingeniero Misael Ferrer Alcolea, al frente de la actividad en la Delegación de la Agricultura santiaguera, dijo a JR que el territorio es el principal productor del maíz seco con el que el país garantiza la base nutritiva del pienso destinado, en mayor proporción, a la alimentación porcina.
Con el precedente de las más de 22 000 toneladas conseguidas en la cosecha de 2014, Ferrer Alcolea explicó que la provincia prevé cumplir sin dificultad el plan de 23 000 toneladas previsto para este año.
En el caso del frijol, cultivo con el que los indómitos también se esfuerzan en tomar la delantera, el directivo refirió que a pesar de ocho meses de intensa sequía que limitaron la producción, se consiguió igualmente sobrecumplir lo pactado.
Manifestó que en el programa para sustituir importaciones se destacan los municipios de Contramaestre, Palma Soriano, San Luis y Songo-La Maya, particularmente Cítricos Contramaestre y la Empresa Agropecuaria Laguna Blanca, que garantiza más del 50 por ciento de las producciones de maíz seco.
Esta provincia, además, se ubica entre las mayores productoras de mango en el país y apuesta por el óptimo aprovechamiento de la fruta, de la que se estima cosechar unas 12 000 toneladas en la presente contienda.
Hernán Almenares Morales, jefe de Frutales en el territorio, dijo a este diario que como es característico en los últimos tiempos, la cosecha se ha diseñado en todas las instancias y se ha previsto cada detalle, con vistas a minimizar las pérdidas y garantizar la entrega a la industria, el consumo social y otros destinos.
Pese a que el clima ha incidido en que esta sea una cosecha atípica con picos de maduración adelantados en mayo y junio, y la aparición temprana de variedades como el toledo, el directivo precisó que ya se han colectado alrededor de 9 500 toneladas, de las cuales unas 6 000 se han destinado a su procesamiento.
Precisamente las 15 fábricas existentes en la provincia (tres grandes, tres medianas y una minindustria en cada uno de los nueve municipios santiagueros), unidas a la voluntad y gestión de las autoridades por asegurar los envases, son fortalezas que obligan a los productores a empeñarse en cumplir sus compromisos.
Aunque los mayores obstáculos de la cadena siguen estando en las fábricas, con una tecnología en su mayor parte obsoleta, la pretensión de este año es entregar a la industria 8 000 toneladas de mango para la elaboración de pulpas destinadas a las compotas de la canasta familiar normada y de helados, entre otros productos de gran demanda.