El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, en la Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP sobre el Ébola. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 05:57 pm
Al comenzar el diálogo interactivo de los jefes de Estado y de delegaciones participantes en la Cumbre ALBA-TCP sobre el Ébola, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, señaló que esta era una a convocatoria de Chávez a través de Nicolás, y valoró que era una iniciativa que estaba haciendo falta en nuestra región, porque ya en Centroamérica estaban haciendo esfuerzos.
Esta iniciativa puede abarcar también a la Celac en enero, en la Cumbre de esa organización, apuntó Ortega, quien agradeció en nombre del pueblo de Nicaragua la permanente solidaridad de Cuba, destacando ahora que el contingente de médicos cubanos combatiendo al ébola en África están a la vanguardia.
Dan la batalla para que esta epidemia no avance en nuestro territorio, en África y también en los países desarrollados.
Explicó que en Nicaragua ya está una delegación de cuatro especialistas médicos cubanos que están capacitando y formando a 120 especialistas nicaragüenses, que se convertirán en multiplicadores para los demás médicos y también para educar a la población.
Hizo referencia el presidente Ortega a la labor que realizan en África médicos y personal de la salud que han estado laborando de manera heroica, y acompañó el dolor de los pueblos africanos donde han fallecido ya miles víctimas de esta terrible enfermedad e incluso de países desarrollados.
Recordó que esta enfermedad va más allá de cualquier diferencia política e ideológica, como señaló el Comandante Fidel, y a que este es un llamado a la unidad y a cohesionar esfuerzos para combatir al ébola.
Apuntó el presidente nicaragüense que aún en algunos países desarrollados se respira insensibilidad, que destinan recursos millonarios para la guerra y no para esta batalla crucial contra el ébola, del cual hablan pero no se sienten las acciones y los recursos de los países desarrollados.
Resten algo de lo que gastan en la guerra y póngalo en beneficio de la salud de los pueblos del mundo, subrayó Daniel Ortega, para que los países desarrollados den respuesta también frente a esta tragedia.