CAMAGÜEY.— El segundo incendio ocurrido muy cerca de la Meseta de San Felipe, que se inició el pasado viernes 21, fue controlado por la labor ininterrumpida de 235 combatientes, según el parte de las ocho de la noche de este jueves.
Radiel Pavón González, especialista de Gestión de Protección de la jefatura provincial del Cuerpo de Guardabosques, informó que este nuevo fuego afectó unas 800 hectáreas de vegetación de sabana, y para controlarlo y evitar que penetrara al macizo boscoso fue necesario abrir cerca de 200 kilómetros de trochas cortafuego.
Independientemente del control ejercido sobre el siniestro, actualmente se abren trochas cortafuego en todo el valle de la Meseta de San Felipe, de unos 70 kilómetros cuadrados de superficie boscosa, para disminuir el peligro de afectación y penetración del incendio a ese espacio.
Desde la pasada noche se inició una intensa guardia de ceniza, que elimina los reductos del incendio dentro del área quemada.