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VARADERO, Matanzas.— Una felicitación a nombre de toda la Juventud cubana fue transmitida aquí al Segundo Secretario del Partido y Ministro de las FAR, General de Ejército Raúl Castro, por la celebración este domingo de su cumpleaños 76 y por su consagración a la formación de las nuevas generaciones de revolucionarios.
Julio Martínez, primer secretario del Comité Nacional de la UJC, exaltó que el mejor regalo a quien ha dedicado su vida a la lucha revolucionaria es ser consecuente con su ejemplo y nunca defraudar la confianza que ha depositado en los jóvenes.
Precisamente en el balance municipal de la UJC de este territorio se constató ese espíritu crítico y autocrítico al que han llamado siempre Fidel y Raúl a la hora de abordar cualquier problema, por peliagudo que sea.
«A veces tenemos miedo de tocar la puerta del director o pararnos en un matutino y decir la verdad», dijo Ariel Sanabria, del Complejo turístico Todo en Uno. Según su consideración, los trabajadores piensan que si son combativos y valientes pueden tomar represalias contra ellos: «Esa valentía política falta, pues piensan que podrán separarlos de sus puestos de trabajo».
Este tema propició la condena a la doble moral y un llamado a elevar la combatividad ante el delito y otros males que siempre acechan y deben ser frenados a tiempo. Quedó claro que en una sociedad como la nuestra tienen que ser desterradas esas deformaciones con el enfrentamiento oportuno.
Yoatsis Nodarse, del hotel Club Amigo, refirió que falta trabajo diario con los turistas extranjeros, que hacen muchas preguntas espinosas, y que esa labor de conversar con los vacacionistas foráneos no es solo de los militantes, sino de todos los jóvenes.
Ella puso sobre la mesa asuntos como el relacionado con los jóvenes que no quieren integrar las filas de la UJC.
En ese sentido Julio Martínez ahondó que es más dañino aceptarlos con condiciones, teniendo en cuenta que la fortaleza de la organización no se debe a la cantidad de sus militantes sino a las convicciones que sustentan.
El dirigente alertó sobre la preparación para enfrentar las preguntas que hacen los turistas sobre la realidad cubana, y para eso sugirió que el comité de base tiene que identificar a los jóvenes con mayores dificultades y nutrirlos de los elementos que enriquezcan sus explicaciones.
«He visto a jóvenes que no poseen argumentos», valoró Liudmila Valdés, del hotel Villa Cuba, quien además afirmó que hay que prepararse bien para brindar respuestas convincentes sobre la realidad cubana.
Pero el polo turístico no es solo playa y sol. En este balneario se construye, los niños van a las escuelas y varios programas de la Revolución llegan como al más intrincado de los territorios del país.
En el balance se analizó que aun cuando en el municipio existen plazas laborales, hay alrededor de 40 jóvenes desvinculados que no aspiran a nada.
En varias intervenciones hubo también alertas para enfrentar a esos militantes fantasmas que solo asisten a las reuniones y no se preocupan por nada más.
Daily Alfonso, del Hotel Iberostar Varadero, fue más lejos, al enfatizar que algunos tienen el carné para taparse; sin embargo, la Revolución lo que necesita son jóvenes por convicción y no por conveniencia.
En resumen, los jóvenes comunistas del mayor polo turístico del país coincidieron en que en cada hotel, centro escolar, de la salud, la construcción, los servicios... no solo deben velar por la eficiencia económica, sino afianzarse como baluartes del socialismo y defensores de la Revolución.
