Monumento en El Uvero. Foto: Raúl Abreu El Uvero nos dejó como enseñanza que hay que estar preparados para una larga lucha, y que no importan los obstáculos; si la convicción y los esfuerzos son desplegados, seremos capaces de vencer a cualquier enemigo, manifestó el Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez, en la conmemoración del Aniversario 50 de ese decisivo combate.
El también integrante del Comité Central y Ministro de la Informática y las Comunicaciones, uno de los participantes en aquel hecho, destacó que al cabo de 50 años el más profundo mensaje de ese combate es que hay que seguir las ideas de Fidel, pues su espíritu revolucionario, su análisis inteligente de cada situación son garantías para la victoria.
Destacó el valor militar y político de la acción, al demostrarle a Cuba y al mundo en aquellos momentos que existía una fuerza revolucionaria capaz de derrotar a un régimen que era apoyado totalmente por el gobierno norteamericano, y al mismo tiempo ratificar la validez de la estrategia de Fidel de que se podía vencer militarmente a un ejército infinitamente superior.
El de El Uvero fue un combate duro e intenso, una de las acciones más sangrientas de la guerra de liberación, rememoró Valdés, pero fue una victoria que estremeció al país y que abrió una nueva etapa en la lucha.
Según la AIN, en el actual municipio de Guamá, en el escenario histórico de los hechos, a unos 120 kilómetros de la ciudad santiaguera, miles de pobladores serranos participaron en un acto político y cultural que recordó la trascendencia de una acción valorada por el Che Guevara como la que marcó la mayoría de edad del entonces naciente Ejército Rebelde.
En el acto participaron también los miembros del Buró Político Misael Enamorado, primer secretario del Partido en Santiago de Cuba, y el general de cuerpo de ejército Ramón Espinosa, jefe del Ejército Oriental.