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Actualmente los hombres en edad reproductiva pueden padecer problemas de infertilidad a mediano o largo plazo producto de la contaminación ambiental que debilita la calidad de los espermatozoides, según informan estudios realizados.
La contaminación del aire, sustancias químicas en los alimentos, el estrés y otros efectos de la urbanización podrían estar muy relacionados con la pérdida de la calidad de los espermatozoides.
En tanto, especialistas aseguran que el uso del teléfono móvil por más de cuatro horas al día puede reducir la producción de semen, y disminuir la calidad reproductiva del mismo, e incluso causar esterilidad.
Investigaciones realizadas demuestran que las ondas emitidas por los celulares influyen en el número, movilidad y calidad de los espermatozoides. Los expertos descubrieron que aquellos hombres que usaban de forma prolongada el teléfono móvil, tenían la menor cantidad de esperma.
Según los análisis, estos individuos tenían menos de veinte millones de espermatozoides por mililitro, cifra inferior a la que la Organización Mundial de la Salud toma como límite para definir la infertilidad masculina.
Estadísticas mundiales revelan que casi mil millones de personas utilizan los móviles y en algunos países la cantidad crece entre un 20 por ciento y un 30 por ciento al año, lo cual representaría una amenaza potencial para la salud reproductiva de las futuras generaciones.
