Acuse de recibo
El pasado 25 de julio y desde la ciudad de Holguín, Xiomara Cruz Mora contaba aquí que tiene a su hijo discapacitado de nacimiento, que padece una parálisis cerebral y una lesión estática del sistema nervioso central. Es asociado de la Aclifim e integrado a los estudios.
Refería que desde que se mudó a ese lugar hace cuatro años está solicitando por diferentes canales un contrato de gas licuado. Primero con la delegada del Poder Popular. Después con el Órgano de Trabajo y Seguridad Social. Y pidió una entrevista con la Vicegobernadora, quien la atendió muy bien, pero sin solución alguna.
«La última información que obtuve, decía, es que mi expediente está en manos del Ministro de Energía y Minas, pero aún no tengo respuesta alguna. Y necesito, más que una respuesta, una solución, porque cuando no hay corriente no tengo cómo elaborar los alimentos de mi hijo, que además padece de gastritis crónica, toma medicamentos para ello y debe de alimentarse en horarios adecuados.
«Siempre he confiado en la Revolución, que es muy justa y no deja a nadie desamparado y menos teniendo una situación de salud como la de mi hijo, que es un joven integrado y desea serle útil a la sociedad, porque su intelecto es normal», concluía.
Y este redactor añadía que hay carencias y dificultades extremas, pero es muy necesaria una especial sensibilidad institucional para priorizar caso tan delicado.
Al respecto, responde Yarianna Guerra González, directora de la Empresa Comercializadora de Combustibles, que para realizar la investigación y el análisis de la insatisfacción publicada, se visitó a Xiomara, y se comprobó la veracidad de lo planteado sobre su hijo. Le explicaron que a partir de marzo de 2019 la Unión Cuba Petróleo (Cupet) tuvo que suspender los nuevos clientes de servicio liberado, por el déficit de cilindros que existía y aún se mantiene en el país.
Precisa que los casos de personas vulnerables son evaluados en cada provincia por las comisiones creadas por el Gobierno, las que investigan y solicitan excepcionalmente a la dirección general de Cupet la aprobación de contrato de servicio de gas licuado del petróleo, enviando expediente realizado.
Y aclara que la solicitud de servicio no se encontraba en la oficina del Ministro de Energía y Minas, pues estos casos son facultad de Cupet y la Empresa Comercializadora de Combustibles, que evalúan el expediente y aprueban el servicio solicitado.
Especifica que la solicitud de Xiomara estaba siendo procesada por el área de Atención al Cliente de la Empresa Comercializadora de Combustibles, que no contaba con la documentación requerida para realizar el trámite. Al recibir esta se procedió a su aprobación. Y se hizo el contrato de servicio y la compra el 31 de julio pasado.
Añade que por todo lo expuesto consideran la queja con razón. Y señala que esa empresa ha adoptado medidas organizativas que garanticen la seguridad de la evaluación oportuna de aquellos casos vulnerables, considerando la sensibilidad que deben mantener en este tipo de situaciones.
Se agradece la solución del asunto que mantuvo en vilo a esa familia por largo tiempo. Al menos este es uno de esos casos en que, evidentemente, la revelación pública acelera un feliz desenlace.