Acuse de recibo
Entre la indignación y la incertidumbre escribe Sergio Espinosa Corría (Edificio 15, apartamento B-2, Vado del Yeso, Río Cauto, Granma), un usufructuario de tierra, asociado a la Cooperativa de Crédito y Servicios José Nemesio Figueredo, consagrado al cultivo del arroz.
Cuenta el agricultor que posee un tractor marca Yunz-6, con el cual prepara su tierra y le presta servicios a otros productores y a la propia cooperativa. Y cumpliendo las indicaciones de recuperar todos los neumáticos posibles como una forma de ahorrarle divisas al país, entre 2018 y 2019 envió a recapar a la entidad Gelma, de Río Cauto, dos neumáticos 750/20 y cuatro de otra medida. De estos últimos, le entregaron dos, y de los primeros no ha podido conocer su destino.
«Tengo mi tractor parado por falta de neumáticos, principalmente los 750/20. Los que entregué están marcados con pintura con el nombre de la cooperativa José Nemesio Figueredo».
No precisa Sergio qué gestiones ha hecho, si ha denunciado esos sucesos en las entidades correspondientes. Pero, como acudió a esta columna para que le ayudáramos a lanzar su SOS, lo estamos acompañando en su demanda.
Es una vergüenza nacional que un campesino cubano tenga que acudir a un medio de prensa para llamar la atención sobre algo tan insultante. ¿Dónde están sus neumáticos? ¿Hasta cuándo se permitirán tales barbaridades? ¿Qué puede responder Gelma de Río Cauto?
Jorge Pina Hernández (Calle B. no. 504, entre 29 y Zapata, Vedado, La Habana) cuenta que el 3 de septiembre de 2020 le enviaron desde Estados Unidos, y con destino a la agencia Palco, un paquete de medicamentos imprescindibles para sus padecimientos: enfermedad pulmonar obstructiva crónica y asma.
El 17 de diciembre de ese año, sus familiares se comunicaron con la agencia que envió el bulto desde Estados Unidos, y les informaron que ya estaban en puerto en Cuba hacía un tiempo.
«Es decir, subraya Jorge, que Palco lleva más de tres meses para sacar esa mercancía y no lo ha hecho. ¿Quién es el responsable de tanta demora? ¿O este servicio que presta Palco no es importante?»
Refiere que el 12 de marzo pasado se personó en los almacenes de Palco de calle 150, entre 25 y 21A, en el municipio capitalino de Playa, para indagar sobre el envío.
Y para su sorpresa, al buscarlo en el Sistema, aún no aparece, porque el contenedor donde llegó aún está en el Mariel. Y al preguntar dónde podía hacer una queja o averiguaciones, la respuesta de quien le atendió fue que viera a los jefes.
«Lo intenté, pero ninguno salió a atenderme, manifiesta. ¿Hay tanto movimiento de contenedores en el Mariel que Palco no ha podido extraerlo? ¿Qué pasa si las medicinas que vienen ahí se vencieron o se echaron a perder? ¿El Mariel o Palco la reponen?
«En estos momentos en nuestro país hay grandes dificultades con la disponibilidad de medicinas, y es inhumano que se echen a perder cuando de eso depende la vida de una persona».
Sea cual fuere el problema que esté atravesando, si es que hubiera tal problema, lo elemental para una entidad que presta servicios es mantener informado a su cliente con transparencia, explicarle por qué demora tanto la entrega de su envío. Mucho más cuando son medicamentos, que tanta falta hacen. Ello debía ser prioridad uno.