Acuse de recibo
Carmen Aguiar Arias (calle 4ta., No. 2ª, reparto Guiteras, Habana del Este, La Habana) necesitó tramitar declaratoria de heredero a partir del fallecimiento de su mamá, y requería el certificado de defunción, el cual obtuvo en su municipio. Pero este, dice, no refleja lugar de nacimiento de su mamá.
Le dijeron que esa referencia se deja en blanco, y explicaron que el problema se da en los casos de personas con el nuevo carné de identidad, pues este no consigna ese dato. La solución por ahora, señala, es pedir una subsanación de errores del certificado de defunción, una vez que lo tenga en sus manos.
«Me pareció tan absurdo, afirma, que llamé a Registros Civiles en la Dirección Provincial de Justicia. Y la abogada con que hablé, muy amable, me explicó que esa situación es así, hasta tanto no haya una conciliación o algo por el estilo entre los ministerios del Interior (Minint) y el de Justicia (Minjus).
Carmen llamó, igualmente, al Minjus, al Departamento de Atención a la Población, y no pudieron esclarecerle el asunto. «Encuentro ilógico que el documento de identidad nuevo no recoja el dato del lugar de nacimiento, cuando el carné anterior sí lo reflejaba, lo cual conlleva a complicar el trámite con la consiguiente molestia y retraso.
«Estoy segura de que no soy la única persona que ha enfrentado esta situación. ¿Cómo es posible que por un dato que se ha emitido en el documento de identidad, las personas tengan que pasar tanto trabajo para hacer un trámite? ¿Será posible enmendar el carné de identidad para que recoja el lugar de nacimiento de la persona? Esto simplificaría trámites, ahorraría tiempo y dinero, y evitaría más de un disgusto», concluye.
Desde Santa Rita 575 B, entre San Agustín y Clarín, en la ciudad de Santiago de Cuba, Idanis Caridad Cabado Couce denuncia los efectos nocivos de la morosidad y la dilación en estampar una firma.
Relata la remitente que el 4 de 2019 hizo una reclamación de derecho en la Dirección Municipal de la Vivienda (DMV), por un dato que se omitió a la hora de confeccionar el habitable de su casa, el cual fue detectado cuando fue a registrar la propiedad de esta en el Registro correspondiente.
Idanis se ha mantenido en contacto, tanto personalmente como por teléfono, con la asesora jurídica de la DMV, con quien hizo su trámite. La reclamación tiene el número 2036. Y el asunto es que… ¡le falta la firma del director!
«A mí me pusieron una mora y una multa por demorarme en hacer el aporte del 4 por ciento de la vivienda a la ONAT, algo que desconocía. ¿Y quién me paga ahora la mora o multa por la demora y el peloteo de la DMV?», comenta.
La historia que cuenta Alicia Aday Elisundia, desde el barrio La Presa, en el consejo popular Uñas del municipio holguinero de Gibara, reafirma la convicción de que las soluciones no pueden ser globales, a tábula rasa, sin considerar las particularidades de cada quien.
Refiere ella que hizo los trámites para su jubilación, y le informaron que le pagarán su pensión mediante tarjeta magnética. Pero ni en Velasco ni en Gibara hay cajeros automáticos. Y para cobrar su jubilación, la señora tendría que trasladarse a la ciudad de Holguín, distante a más de 12 kilómetros de su domicilio.
«Y como están los precios de los pasajes, afirma, se me hace muy difícil acceder a la capital provincial, si no es desembolsando en ocasiones precios muy altos. ¿No sería posible una excepción para mi caso, teniendo en cuenta que de mis ingresos dependen además mi hija y dos nietas?», concluye Alicia.
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