Acuse de recibo
El pasado 3 de junio, y desde Campechuela, Granma, Roberto Rosell Pardo elogió aquí la fabricación nacional de ómnibus Diana, que van paliando al menos necesidades de transportación. Y al propio tiempo les hacía señalamientos.
Decía que hay pasajeros lesionados por las puertas de esos ómnibus, pues apenas hay espacio entre aquellas y los marcos. Y que las puertas debían tener gomas huecas para, si alguna vez traban a alguien, no lo dañen bruscamente. Que los hidráulicos para abrir y cerrar las puertas son muy potentes y operan con gran velocidad.
A ello, añadía Roberto asuntos referidos a la conducta de los choferes, quienes permiten el exceso de pasajeros en esos ómnibus pequeños: De 18 que deben ir, muchas veces aceptan hasta 30 y 40. Y cierran las puertas sin cerciorarse si alguien sube o desciende en ese momento.
Al respecto, con fecha 11 de junio responde José Luis Toledo, director general de la empresa productora de ómnibus Evelio Prieto Guillama (Caisa), para señalar que el ómnibus Diana es un producto relativamente nuevo, diseñado y en producción en tiempo récord, para paliar la crítica transportación de pasajeros en el país.
Informa que los técnicos de esa empresa se nutren de los criterios de la población y de los especialistas que se ocupan de la explotación y mantenimiento de esos equipos. De ahí que los criterios de Roberto se tomarán en cuenta por los diseñadores para buscar la solución más adecuada.
Asevera que en los procesos de producción y venta de los ómnibus, la fábrica continuará la verificación de los parámetros de regulación del mecanismo de apertura y cierre de las puertas, para evitar que los ómnibus salgan al mercado con ese problema.
También enviarán a todos sus clientes y prestadores de servicios de mantenimiento, las instrucciones de trabajo, de cómo se deben regular los mecanismos de apertura y cierre de las puertas. Y el personal de Asistencia Técnica de Caisa, durante su recorrido por los diferentes territorios del país, chequeará el funcionamiento de ese mecanismo; y capacitará a los especialistas encargados de garantizar la correcta regulación de los mecanismos de apertura y cierre de las puertas durante la explotación de los equipos.
Por otra parte, en cuanto al proceder de los choferes señalado por Roberto, explica que esa entidad enviará carta de notificación a las empresas provinciales de transporte, para que, con la participación de las administraciones y los órganos de control en los territorios, tomen las medidas necesarias para evitar los problemas señalados.
Se agradece la disposición de Caisa a considerar los señalamientos y perfeccionar un producto que nació de la urgencia. Y lo que está fuera de su alcance: ojalá que las empresas de transporte logren que los choferes de las Diana «manejen» las sugerencias con receptividad.